La ventana

El octavo piso detenía estas ganas de presentirme en el final.
Solo eran unas cuantos metros,
la caída a la libertad.
Pero solo me detenía la ventana aquella
que como puerta,
en su callada luz solía preguntar:
¿pasarás?
Era tan tentador su camino
cuando las hojas de sus vidrios
el aire dejaban pasar.
Quería asemejarme a las aves
o tal vez morir sin mas.
La altura era segura
y como pude me acerqué a su hipnotizante surco final.
Abrí con cuidado este camino y me senté en el borde
pretendiendo tocar el cielo
y de paso,
despedirme en mi venganza contra mí.
La brisa suave y helada
pasaba por mis cabellos y mi rostro
y pensé en lanzarme al vacío
hasta que abrí los ojos...
Miré hacia abajo
donde estaban estacionado los carros.
No sería decente caer sobre ellos
y ensuciar a los que estaban bien lavados.
Pero solo serían seis segundos de vuelo
hasta darme un buen porrazo
y acabarlo todo en un instante...
El instante en que un ángel
detuvo mi ser
para en ese momento
no liberarlo.
​

 

Si te soy sincero, me parece que tocas el tema del suicidio de un modo frívolo y superficial. Como si tus entrañas nunca hubieran experimentado nada semejante. Saludos.

 

Aleja esas ideas de tu cabeza, quierete a ti mismo sea como sea estas vivo, valora tu existencia porque yo si la valoro, que Dios te bendiga
Realmente este poema no me gustó simplemente por el tema que trataste
Saludos