La virtud

Me gusta caminar por la rivera los Martes en la tarde
mientras el sol escapa del calor circundante
y los pequeños escarnios no hieren la vista vía
a veces puedes ver las niñas junto al rio
su virtud
no se entrega ni se vende, tampoco se regala
se teje y se teje
cada hebra, una lágrima robada con sudor al mañana
cada enlace un ruego mas en la plegaria culposa
rogamos
imploramos
rogamos oh señor
consagra la virtud doncella de faldas caídas
en un buen acuerdo comercial
Recalco: no se vende, se comercia. No confundir.

 

me ha gustdo tu poema amigo, saludos

 

Gracias por leer y comentar