Sal, Azufre, Mercurio

Sal, Azufre, Mercurio

A diestro y siniestro voy llorando
por el callejón oscuro de mis raíces.
Hay un lobo esperando comerse
mis lágrimas y quitarme la lengua.
Al vuelo y sin alas voy gritando
por dentro y con todas mis ganas.

Dolores muy negros, la carne ya rancia,
perdida, desorbitada, buscando la nada.
Lo siento en el cuerpo y taladra mi alma.
Con boca de garra en los ojos me llama.
El lobo me asusta y el lobo me encarna.

A fuerza y hundida voy cayendo
a la espera de la temible vida.
Él me mira, me espera, me inicia,
penetra mi estancia en la sien desnutrida.

El lobo levanta, se acerca a mi esquina,
me entiende, me lee, comete su dicha;
suave y consciente me raspa las cuevas
de venas, la cara, los ojos, socava agonía.

Quedo en sus ojos, fundida en su vida.
Ya somos la parte, el todo. Alquimia.​

 

Marina, esta es tu poesía, siempre te has caracterizado por estas letras preciosas aunque llenas de oscuridad... ¿qué será lo que te hace escribir de esta manera? Uno pensaría que hay frío, que hay oscuridad, que hay dolor...
No sé, será que estoy loco, pero yo veo pasión... porque ¿sabes? hay que tener pasión hasta para escribir letras fortísimas como estas:

"El lobo levanta, se acerca a mi esquina,
me entiende, me lee, comete su dicha;
suave y consciente me raspa las cuevas
de venas, la cara, los ojos, socava agonía."

Un poema para ver la vida de otro modo... el tuyo.
Un beso
Gustavo M.

 

Este triste domingo... me ha traido hasta tus versos..... tu imaginacion no tiene limites Marinita.... y tu pluma dibuja las sensaciones mas intimas de tus sentidos....

Felicitaciones.... un exelente escrito....
Palabras que perduran en la mente.... silabas que encantan...

Un beso...

Saludos desde Ecuador

WALTERDELACUEVA

 

Marina Una Entrega Magistral Mas Y Ya Vannnnnnn Millones Para Tu Coleccion De Amigos..
Te Quiero Muchoooooooooo Luz

 

Es que tengo que citarte porque, Dios mío, me disuelves con tus comentarios, Gustavo, vas quitándo fibras y fibras hasta dejar desnuda y a la intemperie las emociones. Y vas soldando las palabras como filósofo de las profundidades humanas. Gracias, y que la Poesía te bendiga porque vaya, hasta versas hablando.

Marina.

 

Muchísimas gracias, Walter, por tu dedicación a leerme y comentarme. Escribo lo que, humildemente, me dicta el espíritu. Gracias, de verdad.

Un saludo.

Marina.

 

Jo, que buen poema, me encanta tu manera de escribir, es increible, puedes hacer lo que quieras con las palabras y darles belleza... un gusto volver a leerte. Cuidate!
Acepta mis humildes palabras y saludos...
hasta pronto poetisa!

_ALBA_

 

Aquí estoy querida amiga, deslumbrado como siempre con tus versos.
Sabes, los lobos nunca dejan ni un rastro de su presa. Se comen todo;
carne, víceras, cartílago, hueso, todo. Ten cuidado con ese animal salvaje
que asecha dentro de ti y fuera... No sea que se nos coma a nuestra mejor
poeta.

Un beso...

 

El lobo levanta, se acerca a mi esquina,
me entiende, me lee, comete su dicha;
suave y consciente me raspa las cuevas
de venas, la cara, los ojos, socava agonía.

Quedo en sus ojos, fundida en su vida.
Ya somos la parte, el todo. Alquimia.​

Tú sabes, mi querida niña, que a mi esto de interpretar los poemas herméticos no se me da muy bien, pero hoy con éste me ha pasado algo curioso...no he sentido angustia, al contrario, creo que ese lobo no es tan feroz y que en esa alquimia hay química.

Un besazo

 

Gracias Lucecita,¿cómo estás tú y Luis? Ay, os echo de menos. Un abrazo muy fuerte linda, y te agradezco de corazón que te pases por aquí. Voy a estar ausente hasta el día 23, voy de viaje, así que os mando un beso y un abrazo más que grandes, a los dos y a todos.

Marina.