Monólogo con perro

¡Hola, pequeño!
¿Andas perdido?
Ya veo. Te llamas Pistón.

No llores. Te conozco.
Te he visto todas las mañanas.
¡También a tu dueña!
Esa que pone cara de contento
cuando, agarrada a la correa,
la sacas a pasear.

Y dices que su piel sabe a coco.
¡Claro!, tú debes saberlo muy bien,
sus manos y ese lunar en la barbilla
han estado más cerca de tu lengua
que de la mía.

Pero dime,
aquí, en confianza,
¿cómo le digo que por su culpa no duermo
y sus ojos amanecen en los míos?

¡Buenos días, señorita!
Creo que este perro es suyo.
Estaba a punto de llevárselo.
No. No agradezca nada.
Hasta luego...

¡Oye! -al perro-,
lo de las croquetas olvídalo,
no funcionaría.:::sorpresa1:::

 

a veces no importa el puente,...fascinante poema.

No creas que no funciona.

Mis aplausos a tu estilo original.

Afectos.

Jm

 

Excelente poeta, idea, formato, sentimientos, lectura. Todo
Un gusto leerte.

Un abrazo
Daniel

 

jmchicco:
Yo siempre he pensado que el amor se abre paso por entre vericuetos a veces impensados, hasta por medio de un perro. Gracias por tus comentarios. Hasta luego.

 

cipres1957:
Eres de los pocos que se fijan en el aspecto estructural del texto, además de la temática. Gracias por hacerte presente. Hasta luego.

 

¡Hola, pequeño!
¿Andas perdido?
Ya veo. Te llamas Pistón.

No llores. Te conozco.
Te he visto todas las mañanas.
¡También a tu dueña!
Esa que pone cara de contento
cuando, agarrada a la correa,
la sacas a pasear.

Y dices que su piel sabe a coco.
¡Claro!, tú debes saberlo muy bien.
sus manos y ese lunar en la barbilla
han estado más cerca de tu lengua
que de la mía.

Pero dime,
aquí, en confianza,
¿cómo le digo que por su culpa no duermo
y sus ojos amanecen en los míos?

¡Buenos días, señorita!
Creo que este perro es suyo.
Estaba a punto de llevárselo.
No. No agradezca nada.
Hasta luego...

¡Oye! -al perro-,
lo de las croquetas olvídalo,
no funcionaría.


_________________________


Guauuuuuuu... Lo de las croquetas, no. Pero sí que funcionaría pasarle estos versos debajo de la puerta.
Excelente, viento. Poesía de amor/humor.


Estrellas pícaras y un maullido... :::sonreir1::: También un abrazo de todas las faunas.

 

Ciela:
Muy buen tip lo de los versos debajo de la puerta, sin embargo, pensándolo bien, quedaría en el anonimato. Sigue pesando más la sugerencia de Pistón, aunque sé que no funcionará. Recibe un gran beso (desde luego no canino). Hasta siempre.

 

Me gustan estos versos,
son distintos, originales.
Me gustan los perros, así que disfruté el diálogo con él.
Oye, ¿y por qué no va a funcionar?
Si no lo intentas no lo sabrás.
Un abrazo.

 

Amartemisa:
No te creas, el consejo lo tengo considerado. Antes probaré una para saber cuál sería la reacción de la interesada. Si no me hace daño, haré la prueba. También a mí me encantan los perros. Gracias por tus palabras pero más por tu lectura. Hasta luego.

 

muy buena imagen, sin duda por una chica así habra que usar hasta al perro como recurso

saludos

 

lineas bien plamadas amigo, saludos gusto en recorrer tus letras..

 

Francisco Lechuga Mejía:
Como reza el refrán: "en el amor y en la guerra todo se vale", y un perro es un buen pretexto para el acercamiento. Gracias por tu lectura.

 

Vidit:
La idea es que la "vìctima" sepa que quiero todo con ella. Hasta luego.

 

Buen trabajo amigo, tienes una imaginación genial...un placer leerte, un abrazo...

 

Què bonitas imàgenes vienen a mi mente luego de leerlo, es un poema hermoso!! Y una bella historia,..mi opiniòn, deberìa intentar lo de las croquetas. Precioso Pistòn!!!.

Un gusto leerlo.

Cordiales saludos

 

legendario:
Es verdad. Muchas veces hay que echar a volar la imaginación para obtener el resultado esperado. Hasta luego.

 

Mariela Marianetti:
Creo que tienes razón. Yo también he pensado en el asunto de las croquetas. Siempre hay que agotar todos los recursos para que tu amor te haga caso. ¡Que no pare por intentos! Un abrazo.

 

Como me gusta la perspectiva vista desde el otro lado (es que es el perro quien saca a pasear a su dueña)...si, es absolutamente cierto pues se obliga a caminar en torno a las necesidades de quien nos creemos dueños absolutos; ahora, nada como ese espacio de devolución donde en la entrega se vuelve a ser el adolescente tímido y todo lo que se lleva por dentro se vuelve a guardar en el temor del rechazo. Las croquetas pueden funcionar si se invita a la dueña y se deja al perro en casa (broma)...me encantó todo el monólogo y este avatar tuyo lo ratifica.

Mis abrazos por cada poema tuyo que se explora y nos enseña.

 

tuti:
Precisamente la foto del avatar me dio la idea. Y mi perrita logró aconsejarme que, al menos ella, disfrutaba mucho los paseos. Todo esto unido y mis recuerdos de adolescente (pretendiendo enamorar a una mujer y por miedo no lo hacía) se amalgamaron para dar como resultado estos versos. Me gustaron mucho tus comentarios. Hasta siempre.