Reflexiones

Reflexiones.




Esta madrugada
en el silencio de mi habitación,
hablando contigo en mis pensamientos
no logré conciliar el sueño.

Hay instantes en la vida
en que necesito más de tí,
que me comprendas y aceptes como soy
con mis defectos y virtudes,
que te des cuenta que soy humano
y que estoy propenso a errar.

Hay instantes de infortunio
en que tengo ganas de un abrazo,
de una palmada en el hombro como muestra de afecto
saber que estás conmigo,
ver en tus ojos que te importo,
que prestas atención a mis palabras
y que dedicas parte de tu tiempo a mi cariño.

Me gustaría saber que te hago falta
que entiendes que no soy perfecto,
que suelo equivocarme a veces
y que a pesar de los golpes de la vida
aún tengo un corazón noble y sensible.

Hay momentos a solas como éste
en que necesito mucho más de tí
para compartir juntos la magia de éste sentimiento,
el encanto de tu compañía
y tomados de la mano caminar al sol.

Que me cantes una canción
con esa ternura maternal que a tí te sobra,
hasta quedarme dormido entre tus brazos
y despertar con un beso de tus labios
o un te quiero profundo, apasionado
con aquel característico tono de tu voz que adoro tanto.

Hay momentos en la vida
en que necesito que seas solo mía
y yo ser tan sólo para tí
dándole vida a nuestros sueños
como aquel hermoso día cuando te conocí.​

 

Realmente te aplaudo por esos hermosos versos de amor, llenos de sentimiento.
Todo un caballero esperando los besos y caricias de su amada dama, un pedido de auxilio en esa noche de soledad, creo que serás más que escuchado con esas palabras poeta...

Un gusto leerte, besos mil!

 

Un placer leerte.
un beso,
Rosario