Lúgubre.

Ausente en el alba la mariposa que rosa​

tus labios a mi ausencia la luna,​

la musa que muere al crepúsculo en mi alma reposa,​

la ninfa que se oculta en carmesí contraste, la duna.​

Lúgubres rostros se reflejan en el mar,​

por la ignominia abominable de los que no saben amar,​

trazos vacíos de almas en penas miro en vez de auroras​

súcubo que juegan al amor a mi alma afloran.​

De ensueños vive el querubín en el infinito,​

ensueños que para el vagabundo sólo es un mito,​

el ángel que custodia tu trono hoy se ve al espejo​

pues no entiende, ni ve su destino, su dios lo ha dejado ciego. ​

 

Qué bien mi hermano, usted escribe del carajo!!!

 

Cadencia y musicalidad en los versos, bellos.
Agrego un acento faltante. Abrazos para ti,

 

Interesates líneas Roniel.

Gracias por compartirlas.

Saludos.

 

Qué bien, Cesar.
Admirable tu poema desde todo punto de vista.
Un agrado leer y degustar tu poesía.
Abrazos, estrellas.

 

Muy bien poema, poeta. Me gustó el final:

el ángel que custodia tu trono hoy se ve al espejo​

pues no entiende, ni ve su destino, su dios lo ha dejado ciego.

Placer leerte. Saludos.
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