¿A quién llamas?

¿A quién llamas?
Es viernes de proclama.
Te sientes en flamas
y tu cuerpo reclama.

Tus pupilas dilatadas
y tu seno turgente.
Tus manos preparadas
ya te es urgente.

Llamas apurada
a su número celular
pues estás cansada
de tanto esperar.

A ti vendrá corriendo
descubriendo el momento
en que irán fundiendo
paredes, piso y cemento.

©®Todos los derechos reservados bajo el nombre de Jorge de Córdoba, Cesarfco.cd​

 

Las llamada siempre dan impaciencia...
Un abrazo
Rosario

 

Buenas letras César,
muchas veces se pierden los nervios por la impaciencia
Abrazos

 

un buen poema has escrito siempre con un trasfondo que en la mayoría de tus versos encuentro y en éstos igualmente,no son literales hay que ir más allá y veremos otro significado que esconde y muy bien dicho,Estupendo t decir poético,cada día mejor.Mis estrellas y un abrazo.Salvador

 

Menuda descripción de un deseo realizado por parte de los dos, con sus momentos de espera y nerviosismo.

magnífico Cesar. Te doy estrellas.

 

Hermoso César, tu poema es hermoso.

 

Casi siempre... Pero es un dolor gozoso.

Un abrazo Rosario.

 

Hay que tenerlos bien templados, Sergio.

Recibe un abrazo fraterno.

 

Valoro en mucho tu comentario Salvador.

Gracias por leerlo y comentarlo.

Recibe un abrazo fraterno.

 

Gracias Oldbyte, un gustazo verte por estos lares.

Un abrazo.

 

Gracias mil Ludmila por pasearte entre estos versos.

Un abrazo.