Alma Blanca, Arma Blanca

Alma blanca,
que has asestado certera entre mis costillas,
dejando escapar un hilillo de vida,
junto a mi grito ronco que se dejó manosear
entre alaridos de miseria y una sutil blasfemia
que se ahogaban lejanos dolientes en mis oídos,
más mi súplica que no te adentres, más acaso la entiendes
y ríes refregándote al final de mi corazón,
que sólo aullaba nostalgia y un pellizco de perdón.

Alma blanca,
me dejaste tirado en el ripio
escupiendo blasfemia a tu sórdido concilio,
más las almas danzan como rito
delante, detrás..., al lado mío,
y la luz se nubla por la bruma,
hasta quedar un cordoncillo
y la noche se hace oscura,
hasta que de ver se ha vuelto martirio.

Arma blanca,
te meces enrostrada en el pómulo de mi cara,
y siento borbotones que surgen desde mi alma,
luego desespero y cubro mi llaga,
mis dedos se encolerizan surcando la mirada,
y duele mi alma con el arma ensartada,
que un día sin pedirlo se afincó enmarañada,
detrás de mi escarcha
y delante de mi estampa.

Arma blanca,
de mi alma ensangrentada,
hoy jugaste con la vida de esta silueta encantada,
que envanecida se prestaba,
a rodar por la vida despreciando su alma
y de su historia envejecida con una arma ensartada
se quedó un día sin luna sobre la bruma destilada...... ​

 

Letras muy melancólicas que delatan
Ese dolor temporal que hay en tu corazón,
Sabes… aunque en la vida pasemos por
Duras penas, vale la pena vivirlas
Un gusto leerte, saludos…
Un abrazo:::hug:::

Wilmer.

 

Amigo Wil...., el poder exorcizar la melancolía ya es alivio, para este poeta, como para quien haga suyas mis letras..., agradecido de tu lectura un abrazo.

 

Issis...., los versos se traen siempre a la memoría, pues somos personas de este mundo y en más de uno de ellos habremos vivido..., un abrazo cariñoso.

 

Cariño...., agradecido de haberte albergado en mis versos hoy difíciles, hoy tristes...., un abrazo para recibir tu abrazo.

 

Leer cada verso fue un encanto. La rima que utilizas me gusto mucho. Te felicito Raul nuevamente. Un gran abraso.

 

Nuria..., encontrarte entre mis versos es muy encatador, más aún si dejas un comentario tan cálido..., un fuerte abrazo.