Confesión

Confesión


-Allí, donde el fuego quema

y vaga el espacio de un trueno,

justo allí, donde el sueño rompe,

donde el silencio grita;

en un lugar de riqueza,

en la miseria,

en un vacío de realidad,

allí, nacen los suspiros.

Mueren las olas allí,

en el golpe con cada piedra,

en el combate,

en un pozo de ilusiones,

donde un deseo se trueca en luz

y baja por el sendero del sentimiento.

Allí caen mis alas.

-¿Por qué expresáis

tales sentimientos

con tanta tristeza?

-Cuando un dolor amanece

y esculpe lentamente

las gotas del corazón,

una pena oscurece

y el viento arranca

la inocencia de cristal.

Y si este dolor

vos no sabéis qué dolor es,

sabed que amar duele,

que agonizo de dolor

pues amo más

que el mismo amor sabe amar,

no queráis saber tanto.




-Vos empezasteis

a hablar al amor.

-Callad vuestra lengua y,

callad vuestro pensamiento,

tal mirada revela halagos

que no quiero entender,

callad, os lo ruego,

no quiero leer el silencio,

sus ojos hablan de amor.

Yo hablo de un lugar

donde nacen suspiros,

donde mueren las olas,

hablo de un mundo extraviado

entre la carne y la razón,

yo recito al alma,

cárcel de todas mis pasiones.

-Osado soy por contemplaros,

pero no atrevido hasta ahora,

justo cuando mis labios

han surcado la santa palabra.

Vos habláis del alma

¿y en el alma

no vive el amor?

Yo hablo de amor

con los ojos del alma,

y vos habláis del alma

con la voz del amor.

-Dejadme,

irrumpisteis en mi soledad,

oísteis mi desaliento,

dejad que llore sola,

idos.




-No marcharé sin antes

ser vuestro consuelo,

no soñaré sin antes

calmar tal pesadumbre,

no dormiré en paz

hasta saber tu causa.

-Rendid la paciencia,

no seáis descortés,

que el aire fluya

en mi espacio,

y que vuestro espacio

sea el aire

que yo no respire.




-Ruego oír de esos labios,

cuevas de misterio,

qué pasión encubrís,

y pido a Dios,

fiel guardián de mis actos,

que sea yo toda tu pasión.

-¡Insolente!

Queréis ser dueño

de mis suspiros

y no sois nada,

creéis amar

con toda el alma

y jugáis con la flor.

¡Os odio!





- Tan pronto me odiáis

y tarde me amáis,

lejos de vuestro amor

y tan cerca de un beso.

Mi dulce amada,

permitidme sólo confesar,

como el pecador

revela sus pecados

yo desvelaré

mi silencio.

Os amo, tiemblo por ello,

deseo caer en esa mirada,

vivir en esas palabras

como esclavo de los versos.





Tenéis la tristeza del cielo,

el alma del poeta enamorado

que mendiga con la pluma.

Os adoro, y muero por ello.

Callaba este amor

como aquel

que sufre en silencio,

sentía este fuego

como el ciego

que arde en las llamas,

y maté mis deseos

en brazos de otras,

y creí olvidaros,

mas solo pude amaros.





No habléis,

no me odiéis,

no pido vuestro cariño,

solicito perdón

por negarme al amor

que no me ama,

necesito perdón

por enterrar tu alma

que es mi alma,

no sintáis compasión,

no recéis por mí,

no finjáis.









-Jurad ese amor,

selladlo en mi sangre,

clavadme vuestras palabras

como se clavan sentimientos,

jurad esa dolencia.

-Os juro amor perfecto,

prometo amor eterno.

Decidme

¿me amáis?

-Decidlo antes vos

¿me amáis?

-Con el alma,

mi dulce dama.

-Y yo a vos me entrego,

mi caballero.

 

Esto es lo que yo llamo una obra de arte!
te felicito esta espectacularmente logrado.

saludos...
Sandro Moreno

 

Confieso que, pese a la libertad tomada en la composición del poema, éste ganó mi corazón y mi pensamiento desde la primera palabra hasta la última. Muy, muy bueno; rayando la máxima puntuación.

 

Gracias, Osric, lo que me dices significa para mí lo que tú no peudes imaginar. Mil gracias.

 

Paseándome por tus letras, volví por este poema...y cada vez que lo leo me gusta más. Me dice mucho, mas no digo nada...que me extasia el principio y me enreda de tal forma que no puedo apartar la vista hasta no haber leído la última palabra.
Besos!

 

Tú siempre tan esmerado conmigo, naúfrago...GRACIAS, GRACIAS, GRACIAS.....y mil gracias.

 

Por semejante diálogo poético.
La pasión culebrea entre las letras. Las palabras rezuman la ansiedad de quien ama. Algunas metáforas me hablan de una mujer que entrega su prenda de amor, sabiendo que nada puede esperar a cambio.
¡Vaya con este poema!
Merecido el premio que se le ha otorgado, amiga mía.
Un cariño,

Luis

 

Tú, cada día, me sigues descubriendo, cielo. Cada día lo haces al dejarme trocitos de tus palabras y de tu alma.

Un abrazo, Martín.

 

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¡Qué maravilla, Niña!... Mientras te extrañamos matizo la nostalgia con tu obra maestra.

Hasta la vuelta y un abrazo.

 

Ay Lord, el primer poema que aquí publiqué, ya, dentro de un mes, hace un año que estoy en esta página, celebro que lo comentes ahora, pues fue el comienzo de iniciar aquí una bella historia de entresijos interiores, en fin Poesía, que es lo que aquí todos adoramos.

Gracias por comentar, Lord. Estoy inmensamente halagada y agradecida.

Marina.

 

Ya lo creo que es impresionante el poema,tanto como la delicadeza de esta bella escritora.¡Magnifico,mi niña Marina! Ojalá te veamos mas por aqui.Se te echa de menos.Con cariño,Ariel.

 

Con este poema me pongo de pie y aplaudo hasta cansarme...

aplausos, aplausos, aplausos, aplausos, aplausos,
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