Mélida

No me asombra,
me asalta de otro modo hoy, tu nombre.
Me invade y es inútil;
como estéril es el patio de tu casa.
¿Dónde está la calle aquella Melu?
¿Dónde amor, dónde vive la tarde aquella?
Tengo, la noche aún del verano; intento tenerla.
Ya sabés, el naufragio es absoluto.
La feroz presencia de la verja;
la complicidad de Doña Ana,
los bailes, los juegos en la cuadra.
Alguna vez te digo,
alguna vez tuve tu nombre.
Y fue mágico tenerlo.
Y fue hermoso descubrir que entre la gente,
entre la triste gente tuvimos la loca algarabía de soñar.
Hoy, ¿hará cuántos años Melu?
Porque los años pasan, resuelven las cosas;
indican el camino que no tomamos.
Transitan absurdos en el reloj.
Noche, la calle Melu;
¿te acordás de aquella noche hoy?
Dónde estará esa pequeña luz descubierta;
dónde vive la fugaz terraza de mi casa.
¿Será posible aún el paraíso?
Al oir tu nombre, ¿quién se asombra?
Simple tu nombre Melu; ¿puedo llamarte así?...


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Sinuhe amigo le quite el cero a tu gran poema me gusto mucho los personajes que usaste tus imagenes no se mucho de ellas pero me parece que las hubo disculpa el comentario pero te los hago sinceros aunque no sepa hacer buenos comentarios pero tu me ha encantado no se por que no lo habian comentado a mi me parece bello un saludo amigo.

 

Francisco, tus comentarios son los mejores; gracias compañero...

 

Hola Sinuhé

Me parece que tus versos los escribes sin dejar tiempo a la razón a que piense...así tras cada pulso, cada golpe del corazón dejas que fluyan los versos y le das libertad al pensamiento, creo que es un estado al que todo poeta queremos llegar.

Tu historia...me llama la atención esta perspectiva que le das a una historia de amor, por lo general en los poemas siempre hablamos sobre dos personas...y ahora tu involucras a todos los personajes secundarios, que estuvieron allí presentes, que nos vieron en las buenas y en las malas, y sabes? resulta igual de melancólico y de doloroso a veces que en este punto todos los personajes tienen la misma importancia e impotencia ante el destino de no poder modificar sus designios.

Siempre será un placer leerte.

Muchos saludos.

 

Tu capacidad de análisis, es sin duda el mejor regalo que recibo hoy de ti, abrazos y felicidad a ti, amiga...

 

Vaya...

Yo soy una maldita por no haberlo leido antes...o si lo lei, no saber que comentar...¿me sucede sabes?

A veces te espio y me hundo en el silencio.

 

El silencio... te aseguro que no querrías saber lo que es el silencio...