Yo

Mis manos, mis dedos,
mis uñas, mi resto del mundo.
Mi cuello, mis labios,
mis ojos, todo lo que miro.

Mi cuerpo, mis vísceras,
mis huesos, universo secreto.
Mis bíceps, mis brazos,
mis hombros, sujetando la vida.

Mi madre, mi mujer,
mis hijas, eternidad consumada.
Mi barrio, mi casa,
mi cama, centro de operaciones.

Como la punta metálica
de un compás,
clavada en la orbe que me envuelve.
Fin y principio del todo.

Sólo yo, no soy mío.
Y el destino me arranca
todas las propiedades,
y me desnuda bruscamente
abandonando los despojos,
que son unos ojos asustados
contemplando el transcurrir ajeno.

Con la estricta complicidad
del raudo existir.
Con el don efímero y exhausto
de la única posesión rescatada.
La muerte, íntima,
abismalmente propia.
Lo único realmente nuestro
nos distingue de los dioses.

 

Una Diseccion Del Alma Deliciosa

 

Hola Viento - Azul.
Un escrito muy profundo. Me gusto, un placer.

Un abrazo. Eladi.

 

Primera Persona del Singular. Absolutamente Singular pero al mismo tiempo la pluralidad de un puntito inmenso en tu Espejo Poético.

No es cualquier cosa este Yo, es el Yo del Viento. Una foto del que sopla, piensa y escribe. Un yo que no es un apósito sino un centro de operaciones poético.


Estrellas a tu Yo y Esperas del Tú. Y así y así y así... Hasta un Nosotros y un Ellos que nos signe con tu pluma mágica y pronominal.

Un abrazo VientoCielar.

 

Un yo sin estorbos, que mira espectante, que susipira nostalgias, un yo que no le cuesta quitarse la camisa y mostrarse como es, ( jeje foto incluida, por cierto me encanta) un yo que no le cuesta hincharse el pecho para mostrar lo que teme, un yo que es el viento y nadie puede detener cuando se pronuncia en la persona que sea...un yo que es carne y alma...

te dejo un abrazo del alma y un beso estrellado...

 

Gracias rodolfo,
al fin y al cabo,
los poemas vienen a ser eso.

Un abrazo, amigo.

 

Bello.

El no tener control de su propia existencia y derramar por los poros lo único a lo que podemos aferrarnos.

Bello.

 

Encantado Eladio,
de tenerte aquí.
Un brindis por los inicios,
hace ya muchos miércoles.

Un abrazo.
Tomeu.

 

Luego dices que yo me pongo filosófica. "Asú mecha". El yo gigante ocupando todo el espacio de manera infinita y kilométrica para terminar siendo infinitamente finito y perentorio. La muerte, lo único realmente nuestro que nos separa de lo Dioses, que poderoso esto. Me encanto azulado compañero. Un beso azul para ti.

 

El yo siempre se interpone, aunque tomemos el segundo lugar
Siempre haremos esa estancia notar, un abrazo viento.


Wilmer.

 

Gracias, Ciela de mi almo.
Otra vez, por existir,
y por mimarme.

Un beso enorme,
desde este ego Mallorquín.

 

Gracias Sara,
como tantas veces,
llenando de amistad mis letras,
con tus hermosos halagos.

Un beso eternamente feliz.

 

Que grande decir YO. Una serie de sombras, luces y caminos se entrecruzan
por encima de la frente a la hora en que uno se mira dice, este soy. Un placer leerte. Mis saludos.

 

Exactamente, Amelie,
un placer tu asistencia
y tu destilación de estas letras.

Un beso desde Mallorca.

 

La muerte y el sentir poético. Que decir del sentir enamorado. Felicitaciones compañero

 

Un beso para ti,
tocaya bonita.
Desde mi pequeña isla,
desde mi gran aprecio.

 

Gracias Wil,
es siempre un placer EGOista
el encontrarte en estas líneas.

Un abrazo

 

Muchas gracias Diana,
el placer es mío,
por haberte anfitrionado
en estas letras.

Un beso.

 

Gracias, por tu tiempo y tus palabras,
nos vemos en tus letras.

Un saludo.

 

Muy bien, Tomeu. Bello análisis lírico de tu yo. Aunque también eres tus versos, que los dioses no tienen tiempo de escribir. Tal vez hacer poemas sea acercarse un poco al morir.

Un abrazo desde mi soleada bahía.

 

Gracias Pedro. Lo de que seamos nuestros versos
que los dioses no tienen tiempo de escribir, es precioso.

Un placer tus bellos halagos,
y tus aun mejores poemas.

Un abrazo desde mi azotada bahía,
por un viento gris.