Suicidio

¿Cuanto duele ya el corazón destrozado?
¿Cuanto vale la vida para mí?
Perdiendo entre quimeras la razón del nacer,
Si mi vida esta marcada por la desventura,
Sufriendo los embates de la tristeza,
Dejando atrás las sonrisas que nunca poseí...

Y mirando ahora el profundo hueco de un revolver,
Sé que será un impacto rápido y sencillo,
Sin embargo... ¿porque me acobardo?,
El suave gatillo me invita a jalarlo,
Con una bala por recompensa,
Que será la que termine con mi vida...

La ruleta rusa ¡valiente reto!,
Mas la ironía de siempre... gran cobardía,
El jugarme la vida en esta situación...
Y saber que todo terminará tan rápidamente,
Sin dolor sin sufrir...

El lugar es oscuro y tétrico,
La tormenta afuera parece nunca terminar,
Este lugar salpicado por mi sangre será,
Que se derrame mi cerebro que maldigo día a día,
Y el corazón que tanto lucho al fin descansará...

Queden estas palabras escritas a manera de despedida,
Muriendo por mis propias acciones,
Que no se culpe a nadie...
Ni al amor ni al odio....
Simplemente a la negación de la existencia...

Tal vez el disparo se escuche a lo lejos,
Y encuentren mi cadáver caliente,
Pero no lloren por mí... si al final,
Siempre estuve muerto...
Muriendo en cada respiro...
Llorando por las noches,
Y gritando por el día...

Con melancolía....
Con tristeza me despido...

Lord Vélfragor

 

Pocos poetas han escapado a la atración que ejerce la muerte, esa fiel compañera con la que nacemos, pero que quisieramos no conocer. Buen poema amigo. Espero que solo sea un poema.

Un saludo.

 

Gran poema, muchas de las cosas aqui escritas muchos nos las preguntamos alguna vez.

Espero que solo sea un poema para escrbir sobre algo que nos acecha por cada esquina y no sea una realidad.

Un Saludo

 

muy buen poema me gusta mucho se ve que tiene smucho talento en expresar todo eso te felciito mucho

UN BESO DESDE ACA

 

Lo veo como una gran carta, atestiguando un hecho fatídico, todos pasamos por una circunstancia en la que la vida misma nos aburre... Pero morir no es un escape, la vida es la muerte misma, no es un antónimo, ni mucho menos el lado contrario... La vida es compleja, la muerte en vanas teorías también lo es...

No somos dueños de la muerte (no directamente), somos sus testigos y sus hijos simultáneamente... Tarde o temprano volveremos a casa, y en mi camino transcurrido he visto a muchos valientes utilizando esa arma en pro de la lucha de esta existencia, también he tenido que ver como se me escapan los cobardes, los amores y la sangre por culpa del atrapado en su misma arma, enfocándose el fin a los sesos, partiéndose de gris en el abismo, derramando el vino tinto en la acera, mientras otros mueren secos de vida, enfermos en su ultimo intento, sin balas, sin tan siquiera el suspiro ultimo… la oportunidad del sentido “te quiero”…

Podría decir hoy amigo, que no le temo a la muerte, le temo mas los suicidas que me acompañan en esta guerra…

Buen escrito, y ojala sea como el de muchos grandes poetas, una muerte mas en la palabra, un suicidio escrito inseminando el sentir de un próximo poema... La nueva muerte...

 

Mi apreciado Lord...que es la vida sino un suicidio por si misma...que sómos los poetas melancólicos sino una ambivalencia entre estar hoy y no estar mañana...cada día se nace ...cada día se vive...cada día se muere un poco...te quiero mucho Alejandro...un enorme abrazito ...!