Llamarte mujer

Cerrar los ojos…

Tocar tu piel, como tocar mi piel.

Tu cuerpo similar, pero excitante al final.

Tu sudor, que mis movimientos provocar.

Secarte con mis manos, mojarte con mi boca.

Sentirme dentro, simplemente dentro.

Llamarte mujer y que me respondas “hermosa”

Entender por que tiembla mi voz.

Oler, como huele la pasión.

Rasgarte con mis uñas al compás de tu voz.

Extendernos, expandirnos, encontrarnos.

Saber que me equivoco de género

Y disfrutar sumergirme en mi error.

Tocar tu piel, ya no es tocar mi piel.

Tu cuerpo, excitante hasta el final.

Sudar con cada movimiento.

Sentirte dentro, inesperadamente dentro.

Llamarte amor y que me respondas “amor”.

Hablarte al oído, contarte como huele la pasión.

Que tus uñas escriban “clemencia” sobre mi colchón.

Extendernos, expandirnos, encontrarnos.

Saber que me equivoco de género

Y disfrutar sumergirme en mi error.

 

En el amor no haya errores, hay simplemente eso: amor. Me ha encantado tu poema, gracias por compartirlo.