El otoño imaginado

Cuando caen las hojas lentas

como las letras sobre el poema

me imagino el otoño,

mis lentes requieren más aumento,

mis canas atropellan mis sienes,

mis cejas hirsutas requieren peluquera.



Cuando caen las hojas al río en la ventisca,

imagino el otoño,

solo es el aire, solo es la vendimia,

sola la espalda de la mujer que amé

y aún juega con mi sed de caminante.

No puedo con el trópico y su lluvia incesante

o su caricia de sol deshaciendo las riberas,

necesito que pases como pasó la primavera

delante de mi tapia, sobre las baldosas

de mi loca adolescencia. Fuego de sed

que no se detiene e irrumpe en el llanto

de los niños solos, de los obreros abatidos.



Te necesito, otoño, como una respuesta

que deja las distancias transidas de un silencio

que no tiene misericordia alguna;

que me recuerdes las plazas de la infancia perdida,

que me recuerdes las faldas de las colegialas

y las ventanas llenas de frugales sombras,

sepias, terracotas, ocres, naranjas,

crepúsculos que no viajaron conmigo al andén.

Te necesito, otoño, como algo intangible

que pulula en las pupilas de la mujer que amo,

porque aún despertamos juntos

en la alcoba que inventamos.



Improvisación 11 de setiembre 2017

De mi libro inédito CABOS SUELTOS

 

muy intenso el sentimiento que refleja tu intelecto a traves del otono ya que es una estacion muy apropiada para la nostalgia ya que surge la necesidad de recuperar lo que atras va quedando, creo que a peasr de no ser expert en analisis ni critica puedo decir que este es un buen escrito, me gusto mucho y lo difruste, gracias por tan Buena exposicion, salud y buen dia.

 

Gracias, Frank, aprecio tu lectura y esfuerzo por comentar, me complace que te haya gustado, abrazos

 

Estimado Ronald:

Me ha gustado tu trabajo poético

Saludos cordiales