Lo raro sería...

Lo raro sería…

No creo ser poeta un sólo día,
ni siquiera habré sido algún momento,
cada cual las navega con su guía
y su brújula en este firmamento.

Escribí del recuerdo que tenía,
del dolor, o a mitad del sufrimiento,
o tal vez en la efímera alegría,
o en mucha soledad, o sobre el viento.

Y no puedo hacer más, por más que intente,
las voces se me escapan de repente,
por eso llevo a mano alguna nota

que olvido y se convierte en ilegible,
pero al fin es bastón imprescindible
para el verso rarísimo que brota.
​

 

Tengo un montón de notas mal escritas para no dejar escapar ideas y me pasa lo mismo, cuando vuelvo a ellas no logro descifrarlas. Saludos cordiales, Salvador.

 

Pues en esto estamos, querido Sergio, poco tengo claro excepto que me parecen los versos mejores los que leo más lejos en otros cuadernos.
Muchas gracias por tu compañía, compañero.
Afectuosamente,
Salvador.

 

Sigue brotando versos rarísimos porque gustan, poeta. Abrazo.

 

¡Cuánta amabilidad y benevolencia, estimada Elba! Muchas gracias por tu presencia en estos renglones.
Con todo afecto, un abrazo fraterno.
Salvador.

 

No hace al poeta el nombre sino el vivir. ¿ Acabaremos consumiendo poesía de máquina?
Y a mí si me pareces poeta.
Un saludo.
Jazmín

 

Ciertamente, de la existencia diaria nacen los versos, los alegres, los doloridos, con una ráfaga de viento, con el llanto de un niño, con la miarada perdida de un anciano. Espero que eso no llegue, lo de consumir poesía de máquina, espero que no llegue, pero tantas cosas hay que parecían inverosímiles...
Gracias por estas apreciaciones tuyas, estimada Jazmín.
Afectuosamente, un cordial saludo.
Salvador.

 

Lo importante es que hay materia prima. Saludos.

 

Pero si tú estás hecho de esencia poética, ¿qué nos vas a contar, Salva?
Apunta a vuelapluma todo lo que se te ocurra que luego ya sabrás tú darle forma y regalárnoslo convertido en magnífica poesía.
Abrazos.

 

Eso pienso yo cuando veo de lejos otros cuadernos de notas. Creo que me he repetido, en fin.
Mil gracias de nuevo por tu amabilidad.
Afectuosamente,
Salvador.

 

Pues te haré caso, a ver si voy aprendiendo, al fin en eso estamos.
Te mando un abrazo fuerte, querida amiga.
Salvador.

 

Eso es plagiarse a sí mismo. Jajajajajaja
Saludos.

 

Que me lleven, ¡y bien preso!,
o a la Sociedad de Autores,
que éstos por menos de eso
callan a los ruiseñores.​

Gracias por la advertencia, amigo Sergio, ¡buen Sergio Amigo!
Salva.

 

Platón decía que el poeta es el que conoce (es consciente) la verdad y que sería el indicado para gobernar.
Yo estoy lejos de eso, simplemente escribo para decir algo y lo hago en verso porque si el contenido es insignificante, el continente siempre vale.
Lo tuyo es distinto y este soneto lo corrobora.
Un abrazo.
Castro.

 

Amigo Salvador solo una palabra: Excelente soneto (bueno, dos palabras)
un abrazo

 

Magnífico soneto, Salvador. Siempre feliz de poder leer tu talento.
Un abrazo.

 

Me dejas aquí tu pensamiento, amable Castro. ¿Qué más se puede pedir?
Muchas gracias, por esta entrañable compañía.
Un fuerte abrazo.
Salvador.

 

Dos palabras que valen el oro de tu amistad, así las veo.
Gran abrazo y gracias mil por todo.
Salva.

 

Feliz me haces tú a mí con tu excelente compañía, querido Ángel
Gran abrazo, muy agradecido.
Salvador.

 

Una interesante resolución, yo sí creo que eres un poeta, saludos cordiales

 

Muchas gracias, querida Marianne, por esas consideraciones. Celebro haya resultado ser de tu agrado esta propuesta.
Afectuosamente,
Salva.