Nada es lo suficientemente negro, ni siquiera la noche

Nada es lo suficientemente negro

ni siquiera la noche

para esconderse,

alguien debería saberlo,

alguien con el valor suficiente

para desenmascarar historias

de enroscadas serpientes

tenebrosos castillos,

al calor del hogar

de carbones que prenden

su corazón oscuro,

al igual que amapolas

rímel de pestañas

golondrinas

deseos de un aire que parece remoto

que parece estar hecho de helechos gigantes

con las pertinentes sombras

cargadas al hombro

y otros espejos

de desdibujadas cicatrices

de amores quizás

seguramente,

en esa extensión de verdes en el pecho.



Nada es como parece ser

si de negro se trata,

si comulga en altares de un blanco redondo

mientras mira a través de ventanas

la oscuridad de la noche

manchada de estrellas

y paladas de tierra,

que callando hablan. ​

 

... ni blanco.. siempre hay tonos.. y comparaciones..


Buen versar


Ahora no llueve en Santander

 

Buen poema, asociación de imágenes que me resulta original.

Si alguien hace el ridículo a veces, ese soy yo con mis incontrolables exabruptos.

Saludos

Carlos

 

Por supuesto. Y casi siempre hay algo por pequeño que sea que nos hace ser un poco más felices.
Aquí tampoco llueve y ya por las mañanas hace fresco. Saludos.

 

Amor, hace tiempo decía, tengo ojos negros, pero me no di cuenta de que no hay tal cosa, sino ojos de color café muy oscuro. Tu poema destaca muchas singularidades que nos hacen pensar y es por eso mismo que muchas veces dudamos y nos volvemos escépticos. No me voy a envolver mucho, pero tenemos a los políticos que prometen mil y una cosas, pero nunca tienen la intención de cumplir sus promesas y poniéndoles en poder se olvidan de sus palabras y logrando sus objetivos hacen lo que deberás está en su corazón. Hace tiempo miré una película de una pareja tan enamorada pero que desafortunadamente se quedaron encerrados en una azotea por varias horas. El calor, la humedad hizo que la chica se empezará a despojar de todo lo artificial que traía y de ahí se fue, la peluca, las pestanas postizas y todos otros atributos artificiales que se ponía para hacerse bella. El chico se quedó tan horrorizado del cambio de su amada que cuando lograron salir de ahí, salió corriendo. Esa escena nunca se me olvida, lo que hacemos especialmente las mujeres para pretender algo que no somos. Gracias por escribir este maravilloso poema que nos hace pensar que el no ser transparente puede llegar a dañar a muchos empezando con nosotros mismos.

Aquí en Dallas hoy hace fresco, son las 7:55 am. Necesito mi cafe.


Besos desde los pétalos de tu margarita que me sigue diciendo que “sí”

 

Me alegro que te gustara el poema. Los exabruptos como dices tú desahogan mucho y hay más de uno que se los merece.
Saludos cordiales Chema.

 

Eso pretendo en cada palabra, llenarla de vida. Que lo negro no sea tan negra pues siempre hay una luz en algún sitio como en la noche estrellas.
Gracias y recibe también de mí, mi más afectuoso abrazo.

 

Todos tenemos errores pero lo que no muchos hacen y menos los políticos es reconocerlos. Todos tenemos días, semanas, meses, años incluso muy negros pero entre tanta oscuridad siempre hay luz y esta es tan hermosa, como una noche sin luna pero repleta de estrellas.
Es necesario ser honestos, ser lo que uno es, respetar a los demás, escuchar......
Besos amor y siempre más.

 

nunca es suficiente, dice una buena cumbia que se baila bien tuani.

sobre el tema mae te digo que nunca tenemos suficiente de nada, ni suficiente del placer ni suficiente del dolor. ni del cielo ni del infierno. ya hace miles de años los grandes sabios notaron la persistente incapacidad del ser humano de encontrar la satisfacción más allá de un breve período de tiempo....

se trata de una característica que nos define e intriga a parte iguales. todos sabemos que nos vamos a aburrir muy pronto... sabemos que pronto seremos la esposa del japo marica que secretamente se encuentra con algunos amigos a sus espaldas.

por un tiempo, podremos mantener esa apariencia de suficiencia tras un frágil cristal. pero también nos vamos a hartar del cristal, y de hecho, eso es lo correcto.

nunca hay suficiente luz. nunca hay suficiente oscuridad mae.

salud.

 

Un poema que hace evidente el amplio espectro de colores, tonos y grises que envuelve la existencia humana; tan solo efímera comparada con lo vasto del universo. Apenas somos una un punto ilegible rezagado en el brazo de Orion.