De todo lo que se aprende se alimenta uno

De todo lo que se aprende

se alimenta uno,

se desmaya al hambre,

se despereza a la ruina,

se colorea al negro,

se maquilla al blanco,

se aniquila al hueso,

se mordisquea la carne,

se arrincona al cielo,

se zarandea a la nube,

se violenta al agua,

se muele al silencio,

se dejan sin relojes

golpes y campanas,

se ramifica el invierno.

De todo lo que se aprende

se alimenta uno.​

 

Tanto que he aprendido en estos meses entre ellos la paciencia
una virtud que no poseo. He aprendido que hay maneras de amar
sin estar físicamente cerca, que no existe ni hay distancias solo la
que nos formamos en nuestras mentes. He aprendido que una persona
se puede preocupar por mí cuando no sabe nada por tres días y que siente
que en su vida le falta algo, he aprendido que esa misma persona me hace
falta, mucha falta a mí...EXCELENTE. abrazos con olor a jazmín,

 

Ese algo que nos falta, tan vital como el aire que respiramos, es el amor de esa persona que se alegra y sufre con nosotros, que nos hace ser como realmente somos y nos hace felices.
Besos y siempre más.

 

Un poema certero bien construido, un placer esta lectura amigo Chema, enhorabuena por tu arte. Un abrazo, y mis mejores deseo siempre.

 

Gracias, me alegro que te gustara. Un abrazo grande para ti. Qué pases un feliz domingo.

 

Gracias querido amigo Carlos, un placer siempre tenerte por mis letras. Abrazos afectuosos, Chema.