¡Más maderaaa!

Seguir mi rima estrambótica
presenta problemas varios
cotidianos, casi diarios
que rechazan la robótica.
Desde la lírica gótica
hay que buscar a esta rima
en la familia su prima
y acordarse de que nueve
es el número que mueve
la esdrújula que se arrima.

 

La esdrújula que se arrima
en el verso a su final
es un asunto formal,
y aunque a mí no me da grima
hay que practicar esgrima
para poderla encajar
cual estocada, a la par
le quitámos una sílaba
y de tres pasa a bisílaba...
¡Vaya forma de enredar!​

 

“Vaya forma de enredar”,
dijo el Joven Maravilla
viendo a toda la gavilla
del Acertijo robar.
Y no es solo disfrazar
sus intenciones rapaces:
lucen ropas y antifaces
dignos de un circo demente.
Son una escoria de gente
el villano y sus secuaces.​

 

El villano y sus secuaces
la rima quieren robar
y a la métrica matar,
no van a firmar las paces.
No se si serán capaces
de admitir que su prosado,
con su verso liberado,
nunca sabrá a poesía
y la pregunta del día:
¿Podrán con un pareado?

 

¿Podrán con un pareado
los que afirman que la métrica
es una cosa muy tétrica,
y que suena muy forzado,
además de estar pasado,
el andar siempre rimando
y las sílabas contando?
Uy, que metí una asonancia...
no sé si tendrá importancia,
pero qué mal he quedado.
​

 

Pero qué mal he quedado
con el padre de mi novia;
es un hombre de Varsovia
conservador y aplomado.
Luego de haberle tocado
un “jevi metal” bestial
comenzó a sentirse mal
y el asado vomitó.
¡Luego el perro se comió
su desecho estomacal!
​

 

Su desecho estomacal
se comió el pobre perrito
pero ya ha quedado escrito
que eso es maltrato animal.
Si un asado con metal
lo aderezas a traición
y le doblas la ración
¿Cómo quieres que el polaco
no te mire cual bellaco
y niegue su bendición?

 

¿Y niegue su bendición?
¿Luego de haberse llevado
a su hija del condado?
Con la poca solución
que tiene la conmoción
que nos causa la demente
¡está para Presidente
ese joven tan bravío!
Me parece que es un tío
servicial y muy paciente.​

 

Servicial y muy paciente
siempre fuiste tú conmigo
tal vez porque eras mi amigo
conmigo eras diferente.
Siempre te tendré en mi mente.
Cuando tus palabras leo
me parece que te veo
muy contento y tan sonriente
y aun cuando hoy no estés presente
a veces yo me lo creo.​

 

A veces yo me lo creo
eso de volver a vernos
en paraísos eternos
donde el son sea al solfeo
tan solo un aleteo.
Hay otras veces que dudo
que se deshaga este nudo,
mas quiero que sea cierto
que exista un más allá abierto
para quién vivir no pudo.​

 

Para quien vivir no pudo
reclamo que ese pasado
en el verbo conjugado
deshaga al final el nudo.
Y a la gramática acudo,
sabiendo que es generosa,
si es preciso dadivosa,
para que en futuro escriba
sobre el pasado de arriba
y narre una historia hermosa.

 

Sigo

Para seguir una hora
ya nos tienes en suspenso
¿Quedó tu cerebro menso?
Es inmensa la demora.
¿Do quedó la creadora
musa de tu inspiración?
¿La dejaste en un rincón
abandonada a su suerte?
Puede que halle allí la muerte
por ahogo y sofocón.

 

Del ogro que la tortura
se conoce poco y nada,
pero que está atormentada
no es ninguna conjetura.
Llegó desde Extremadura
a esta loca capital.
Es exagerado el mal
que reparte su cemento:
en apenas un momento
te mata algún animal.​

s

 

Te mata algún animal
si no pisas con cuidado
que su suelo está minado
de prisas de Capital.
Suele resultar fatal
ser educada y madura
necesitas armadura
si quieres salir entera
de esta humana torrentera,
yo me vuelvo a Extremadura.

 

Yo me vuelvo a Extremadura
con mi guitarra campera
en una tarde cualquiera
de solaz y de cordura.
La vida me fue muy dura
en esta ciudad ladina.
Pararé en la Valdoncina,
quiero ver a un familiar.
Luego he de regresar
a mi comarca divina.​

 

A mi comarca divina
le he quitado telarañas,
un buen rato sin mis mañas
la he dejado, en la ruina.
Extrañaba mi rutina
de escribir en Más Madera.
Distante, una quimera:
seguir con esta canción
en el foro, sin presión.
A veces mata la espera.
​

¡Pasé mi examen de admisión!
Gracias por ponerme en oración.

​

 

A veces mata la espera
y es bueno tener paciencia
para que pase la ciencia
a vivir en nuestra esfera.
Solo ha de ser verdadera
y sana nuestra pasión
cuando gana la ilusión
al miedo vestido de ogro
y así se alcanza ese logro:
¡PASÓ SU TEST DE ADMISION!

​

 

Pasó su test de admisión
Don Venancio en el Infierno.
Era un hombre del gobierno,
un personaje panzón
con una gran vocación
de apropiarse de lo ajeno.
Con discurso muy ameno
a todo el mundo embaucaba
y entre líos se fregaba
con el Presidente bueno.​

 

Buscando alegre aventura
las vi al pasar a su lado
y me quedé preocupado,
me pareció una locura.
Aquella escalera oscura
tras la puerta prometía
cualquier vulgar fechoría;
no rebasaban los quince
y al ataque de algún lince
su vida el grupo exponía.

 

Su vida el grupo exponía;
al villano Freddy Krueger
ni siquiera un Schwartzenegger
suertudo lo vencería.
Justo cuando anochecía
nuestro héroe se durmió
y el maldito apareció,
su rostro como un fermento.
Si me otorgan un momento
les cuento lo que pasó.​

 

Me hizo perder el sentido
cuando una falla mecánica
causó una experiencia pánica
y de un horror desmedido.
Hubo un tremendo estallido
y gritería horrorosa
cuando la vertiginosa
caída de la avioneta
destruyó la plazoleta
de forma muy tenebrosa.​

 

De forma muy tenebrosa
apareciste en mi vida
dejándome conmovida
aterida y temblorosa.
Tuve en mi mano tu rosa
mas se deshizo en la bruma.
Entre las rocas rezuma
el agua, que es como un canto
que semeja ser el llanto
que a mi tristeza se suma.

​

 

Que a mi tristeza se suma
esta ira tan dolosa
pues me rechazó la hermosa
más liviana que una pluma.
En mi pecho siento un puma
que lucha por liberarse
y que no quiere callarse,
más no dejo que el rugido
arribe a su agudo oído
ya que no hay que desquitarse.

​

*Sin problema, Maramín; tuve que salir por una emergencia y no la llegué a publicar.

 

Ya que no hay que desquitarse
evitemos represalias,
si parecen necesarias
basta con examinarse.
Y así no considerarse
al primer gesto ofendido;
si no lo hemos entendido
no vamos a dar abasto
y lo dice este nefasto
de profesión, reprendido.

 

De cabeza, con dolores
imposibles de narrar,
para el récord conquistar
me zambullo sin temores.
Clavadista -¡sí, señores!-
yo soy, como mi abuelito.
Viajo como un aerolito
a enormes velocidades.
Sin glorias ni vanidades
la vida me importa un pito.

​

 

La vida me importa un pito,
y yo que no me lo creo
que, basado en lo que leo,
su mensaje no repito.
Ver a Tommy, el angelito,
desde la piedra volar,
me da mucho que pensar:
¿se estrellará en plena roca?
¿al castañazo se aboca?
Se clavará sobre el mar