Quien se hace Señor

“…traficando con los negros, se hizo Señor.”

Reinaldo Arenas


Se hace Señor quien trafica esclavos en blanco,
quien produce esclavos para otros.
Se hacen Señores para siempre
quienes dejan de pertenecer a la tierra
para ser dueños de la tierra.

Hoy venden esclavos como siempre…
y como nunca… casi como nada
circula la codicia de sangre.
Los venden esclavos de sí mismos.
son arrancados de la tierra
en la cosecha de esclavos
como magra simiente.

Se hace Señor quien es consciente de su poder
para pisar cucarachas,
para despreciar y amar bajo idéntica forma.
Huelen a cucarachas sus zapatos.
Ese olor a cucaracha característico del Señor.

Se hace Señor quien abusa sin escrúpulos.
Quien viola sin cometer violación.
Son affaire, pasatiempos o servicios
las muertes que se cobra un apellido en el hogar.

Calaveras, criptas y oscuridad,
fosas y lamentos irreversibles,
condenas invisibles grillan la piel del Señor.
Hace en la absoluta oscuridad
esbozos de la fortuna,
ahoga la lógica en los muros.

Pero nada tapa la pudrición de su cuerpo.
Los ojos son necesarios cuando entierra la dignidad.
La ruindad es su naturaleza.

Las ciudades divergen justo a medida de la ambición,
el horror es un cálculo perfecto.
En los laboratorios de ciudades invisibles
los objetos son piscinas exclusivas,
fosas profundas para esconder la miseria.
Los condenados se atrincheran bajo el agua
amorfos como los sueños, y como sus miedos.

Se consagran al silencio de las almas.
Supuran de últimas esperanzas. Y se quiebran…
con la mueca helada y las moscas de su vida.
Al fin el silencio de muerte lo hace Señor.

©JoséLuisGalarza

 

Se hace señor cuando otros trabajan por él.
Un abrazo, José Luis.

 

El que mejor aprende a mandar. Abrazo Sergio.

 

Me ha encantado el poema, muy político aunque en la existencia cabe todo, un abrazo, José, hasta la
próxima.

 

Gracias estimado Alberto, es cierto, quedó más político que filosófico o existencial, un abrazo.

 

Poderoso poema contra los poderosos. Ese verso se clava y deja frío.
Estás profundo, José Luis. Un gusto leerte.

 

Gracias Luciana por tu atenta lectura, me gustó también el poder de ese verso que hace una suerte de metonimia especial de tono sarcástico. Saludos.