Se ha marchado la noche.

Sin palabras,
la noche silente y solitaria se ha marchado,
mañana, será el único testigo mudo,
de mis besos y mis caricias en su cuerpo.

Pasó la noche, ruborizada y tímida,
como sombras, tú y yo ocultos en ella,
y entre cada beso, nuestras voces tórridas
susurrantes de amores y deseos,
en su oscuridad nos delataban.

Nuestros cuerpos desnudos,
entrelazados bajo sedas blancas,
caricias y besos llovían por doquier,
allí estuviste noche, testigo del placer,
para cuando el día pregunte en su claridad,
no le mientas, fuiste el único testigo insomne
de ese ayer.

Se ha marchado la noche, excitada, se ha marchado,
Mientras tus besos marcan mis deseos de volver.

 

Muy buen poema Solciego muy romántico y tierno. Seguro que vuelve. Un abrazo con la pluma del alma

 

Muy bello poema, atrapa la atención imaginando, ése es el propósito, te felicito. Mi abrazo alegre desde México...

Anthua62

 

Bueno (en estos casos) el amor verdadero, siempre al final de cuentas... sale ganando.
Lo demás (hablando verdades) simplemente está demás.
Me gusto su poema, compañero.
Cordialmente:

 

Gracias José, por tu lectura y tu amable comentario.
Saludos

 

Gracias Anthua62, por tu lectura y muy amable comentario.

Saludos

 

Gracias

Gracias Alde, por tu lectura, muy amable tu comentario.
Saludos

 

Gracias Iván por tu amable comentario. Saludos

 

Muy buen poema, nos has dado una imagen muy romántica de esa noche de amor, tus letras
se impregnan de una hermosa nostalgia por momentos que siempre esperamos se repitan.
Besitos cariñosos vuelen a tus mejillas.

 

A los besos que nos invitan a ese nuevo encuentro, me ha gustado mucho,
ahora besos de luna en la distancia

 

Gracias Guadalupe por su lectura y agradable comentario.

Saludos cordiales.