Suspiros a mi amado

como aquel día a la luz de la luna y velas rojas
tan rojas como las flores que me diste cuando te llevé a conocer a papá
cuando aún no sabía lo mucho que sería capaz de amarte y ya te amaba

de aquel futuro del que tanto hablamos
cuando aún no sabemos hasta cuando estamos

porque aunque apenas esté comenzando
por mucho que me esfuerce por dañarlo
aquí no veo otro final
que no seamos tú y yo en un hospital
tomados de las manos
en nuestros últimos minutos
de este plano terrenal

dedicándole mis suspiros
al que por hoy respiro
al que me quitó la coraza
al que me da paz

te amo y no sé cómo expresarlo
palabras y actos, nada basta
espero sea suficiente la vida
para día a día a mi amado reclamar

es tan mío como mis palabras
y el aire que sale por mi boca sin cesar
debajo de las sábanas y en una librería a las 3 de la tarde
colmados de plenitud y felicidad

no te vayas, ni me dejes
se me va mi aire
se va mi esperanza
se pasa la vida
y seguiré amándote

al pequeño sol
que derrotó a los monstruos
y me tiene durmiendo en su regazo
sin alarmas
solo sus labios

 

Muy bonita y dulce dedicación.
Hermosa melodía.

Saludos

 

La brisa de la tarde recorre las calles.
De Cangrejo a Obarrio, unos cuantos árboles se desnudan con el viento...

 

Muy bonito.Besos desde anadalucía.