La universalidad de lo predestinado. Dios hecha los dados. Y el amor apuesta un hombre y una mujer.

Como lo imaginado me calló
como un baño

Yo me adelanté al Sol antes de la Luna

Y de un paso en la tierra

Llegué perdido sin sombra de elementos

Pero era hermoso perderse como humano dentro de uno mismo

Cuándo los ojos desfilan del verde al azul

Atajan los disparos del ruido

De este a oeste De centímetro a centímetro.


De pronto una mujer sale apresuradamente

De alguna parte del sueño que no se despereza.

Nos ocultamos en la sorpresa cada uno en cada rostro (blanco y negro empujan todas las horas)

Tú/ celta o agua de mujer cascada

Yo/ perdido detrás de cada indio de América

Y la boca isleña habló

Y la mueca indígena creo montañas blancas de alba

Las palabras eran otras piedrecillas del cuadro

Y las plantas respiraban o suspiraban

Nuca debe agotarse el cielo de la primera sombra que alza el vuelo como un ave
de nido!

Solo los nombres fueron necesarios

Y hablaron tanto con los ojos

que sus almas eran bocas.

Sonrieron.

El resto se envolvió en una capa blanca.

Algo supe de ellos luego /algo ...

 

Aplausos!

 

Muy amable Alde. Saludos cordiales.

 

Muy amable mi estimado Mejía. Leche de tigre y una Cuzqueñita bien helada...

Cuidate. Un abrazo.

 

“Y hablaron tanto con los ojos que sus almas eran bocas”…Pues es de lo mejor, mejor que he leído. Felicidades Marquelo .

 

Muy amable Antares. Buen finde.

 

Muy buenas letras Marquelo, un placer leerte. Un abrazo con la pluma del alma. Buen día

 

Muy amable José. Saludos cordiales.