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aunque la vida nos dé momentos difíciles, podemos encontrar formas creativas y hermosas de transformarlos en algo valioso.

 

Solo se puede leer con el aliento entrecortado: son de esos poemas que te recuerdan respirar porque están vivos. Tu corazón leuda en metáforas, lo puedo señalar en cualquier estrella, en un grillo lejano que hace la noche: está afuera porque adentro no cabe con toda esa ausencia sonriente.

Junto con mi agradecimiento va mi sincera empatía, mi admiración y un respetuoso abrazo, querida Carolina.

 

Paco, gracias por comentar. Como bien lo dices, la escritura que te ahorra en psicólogos te ayuda a declarar todo eso que cargamos dentro o que observamos y tratar de embellecerlo con palabras.
Alde, gracias por esa nobleza de comentar a todos. Hay que disfrutar la vida según se nos presente y saber elegir para que el disfrute sea pleno a pesar de esas circunstancias que nos quieren romper.
Pedro, creo que a ti te amamantaron con literatura , me agrada que tus comentarios son poesía. Mi respetuoso saludo y admiración.
Abrazos queridos poetas.

 

El dolor abre en forma de amapolas bellísimos versos y sentencia a tiempo este presente cuando sólo quedan recuerdos en el corazón y unas manos con hambrientas cicatrices.
Has de crecer en el horizonte de tus poemas y amansar a la fiera hiriente que se asoma entre tus pupilas.

Gracias amiga por darnos a leer y sentir tanta belleza. Abrazo.

 

Muy bien escrito su poema... la verdad, tiene una forma muy creativa y personal de
lograr muy bellos poemas. Felicitaciones.
Cordialmente:

 

Creatividad y el espìritu libre. Me encantò el poema, Tu y èl deben enorgullecerse. Saludo amable de Julius.

 

Qalat, Iván y Alberto, muchas gracias por sus generosas palabras. El poema ya tiene unos añitos, marido ya no está, ya no tengo critico en casa, marido era muy buen lector. Me encanta leer poesía en sus comentarios. Abrazos.

 

Me gusta como agregas elementos de la naturaleza no humana. Por más poemas, Caro.

 

Enzo, buenos días. Muchas gracias por tu amable comentario. Abrazos.

 

Pues tu marido estará orgulloso. Tienes talento para escribir poesía. Un poema muy hermoso que he disfrutado. Abrazos.

 

Bellísimo poema dedicas a tu marido amiga Carolina, hermosas imágenes y metáforas pincelan con un toque nostálgico su contenido enamorado, sensaciones a cual más dulces y tiernas nos complacen los sentidos permitiendo su deleite constante.
Un placer conocerte a través de tu poesía Carolina, me ha encantado leerte y es todo un honor dejarte la humilde huella de mi paso....muáááckssssss

 

Amiga Carolina, la vida pasa delante de nosotros a una velocidad que a veces ni nos damos cuenta de lo rápido que se pasan las estaciones. Los años van pasando y cada día no somos más viejos, somos más sabios, pero no nos da tiempo a asimilar todo lo que ocurre a nuestro alrededor.
Ha sido un verdadero placer reflexionar sobre tus letras.
Un fuerte abrazo siempre.

 

Penabad57, Lomitafresdca, Halcón, un honor recibir sus amables comentarios. Gracias por el tiempo de lectura. Abrazos.

 

Me gustó mucho este tema. Por lo bien escrito y por su riqueza en imágenes; seguramente algunas de estas se me escaparon, aunque pasé un rato en la wikipedia averiguando qué son las salicornias, las helicornias(a las que nosotros les decimos bandera boliviana por los colores). Alondras lastimadas, alcatraces vendados... ¿eres un pájaro herido?

Te dejo un detalle un poco ajedrecístico de mi recorrido por tus imágenes...

Las palabras cual alondras lastimadas
se amotinaron, ellas venían en estampida (??eliminaría «ellas»)
a acrisolar los soles que te nombraban.

¡Ah, la conspiración de alas de saltamontes
para desnudar la cosecha! (!)
¡Ay, mi contemplación absorbida
por los poros de este laberinto!

Para cada fisura una sed, (!)
un grillo terco en el insomnio, (!)
un muro erigido en los espejos
empañados de los ojos
que no viste por el aturdimiento
del verbo no conjugado. (!)

Cuando el dolor acecha:
es canto tribal el alarido,
la neblina desdibuja en el puente los pasos,
el tambor es del ocaso,
y el péndulo danza en la espera
como se enredan las colas de las cometas.

No eleves los pañuelos del desamparo,
que he de estirar los brazos
en tu cajita de música.
Todavía el pozo, en la noche
murmura la luz de una estrella, (!!!!!)
amarra su titilar en la entraña,
hala su halo en la memoria de la piel.

¿Cuánto prado palidece en las riberas del río?
¡Ah, los humedales que fenecen
sin la sombra del arrebol! (!!)
¡Ay de los alcatraces vendados
que no hallaron su presa!

La osadía fue cómplice en el estuario,
coreaban las salicornias en la marisma,
el amanecer rasgaba su vestido de ébano (!)
para la entrada del crepúsculo,
y no fue la algarabía de los pelícanos
sino la ola que rompió el silencio de la roca. (!)

¿Qué golpe ha venido a mí para removerme?
Al unísono la parvada de golondrinas
pintan la hierba de los cielos con carboncillo.

Y si resbalo en el zumo de las toronjas:
hay una endecha en el acantilado,
un alga sin clorofila.

¿Serás ácido que junta agua y aceite? (!)
Dame el limón para volverlo mermelada,
que la madrugada mezcla
licor de arándanos
con almíbar de duraznos.

¿Dónde la mordedura de las hienas,
dónde los abrojos de la amargura?
Amasa este corazón sin levadura
con las gotitas de los jazmines,
las cicatrices se desvanecen
al tacto con los ungüentos;
préndeme de tus ramajes
como el colibrí toma el brebaje
de heliconias anaranjadas.

¿Recuerdas los jardines que caminamos?
Hubo un arco que se asió de guirnaldas,
y la paz estuvo en tus manos,
en las palomas que desprendían el fuego
-una cascada silenciosa nacía
en el fulgor de las dunas-.

¿Desertarás en la hora de la locura?
-Sobria es la senda en la perplejidad-
entonces, apresura mi encuentro
en el epicentro de tu temblor,
que no concibo mi arpegio
sin tañer las cuerdas del arpa,
y en mi balada tú añades
a la escala de los bemoles
la levedad de las mariposas. (!)

abrazo
Jorge

 

Musador, gracias por tu tiempo, y los movimientos del Ajedrez, avanzando en el tablero de las letras y las emociones. El poema habla de nuestra relación pese a las cosas tristes alrededor, nosotros sí estábamos unidos, prácticamente todo lo hacíamos juntos. Algunas veces el amor de mi vida me escribía poemas.