Quetalmahue

Después
de todas las ramas
y pastizales venía yo
organizando un pedazo de mi alma
al pie de la marcha de las ovejas.


Siempre amé del viento el desparpajo que hacía con mi pelo.


Aquel ruidoso
titilante furioso rugido
atravesaba las pampas de quetalmahue
como si fuera un Dios que no conozco
pero que me existe en la alegría
de las historias vividas.


La felicidad era eso
terminar el día
en la pequeña caleta
jugando con cangrejos.


Pincoya/febrero 2025

 

Anduve merodeando por Ancud, Castro y Quellón. Y es que tu isla es un mundo aparte. Un beso, Naty.

 

Extraño mi mar sureño Sergio y me anduvo visitando la nostalgia, estoy en el extremo norte . Pero Ancud es mi todo♥️.

Gracias por venir. Abrazote !!

 

Muchas gracias Alde, por estar aquí dejando tu huella.

Abrazos grandes para ti.

Felices días compañero!

 

libertad y conexión con la naturaleza
"Siempre amé del viento el desparpajo que hacía con mi pelo"
precioso, simple y lleno de vida

Un abrazo.

 

Muchas gracias, por venir por tu tiempo de lectura.


Abrazote!

 

Con que poco a veces se puede ser feliz Momentos que forjan recuerdos que nos acompañan toda la vida. Recuerdos de infancia, juventud... siempre se tienen presentes.

Saludos

 

Qué bonito este poema con tanta añoranza!
Un placer pasar.
Saludos.

 

Muchas gracias compañera, por tu tiempo de lectura y comentario.

Abrazos grandes!

 

Muchas gracias compañero. Abrazos grandes para tí, felices días tbn.