Un perseguidor de sombras

Voy buscando una sombra,
una de tantas que me huyen,
una sombra que ni siquiera sé si existe.
¡Oh misterio que te escapas a la luz de mi vista!
¡Oh Amor!¿Acaso queda sobre esta tierra
algo más que tu sombra?
¿Adónde corro con tanta prisa?
¿Y por qué persigo inútilmente a un fantasma
cuyo cuerpo ha de estar pudriéndose
en el baldío del olvido?
Hace tiempo que el corazón del hombre
dejó de creer en finales felices de amores perdurables.

El Amor, la Felicidad,
esos ojos abismales que me llaman en sueños...
Parece ser que soy un perseguidor de sombras,
un iluso poeta con sueños de humo.

Niña, dime que tus ojos no me mienten
cada vez que bebo en ellos
ese dulce licor que me embriaga.
Niña, éso es lo único que mantiene mis esperanzas.

 

...y, bueno, qué querés que te diga? Todo a la altura de tu pensar.

 

Será a la altura de mi sentir.Gracias por pasar por aquí, un saludo.