tropezando con la realidad

A mi melancólica Artemisa:

En el oscuro llanto de mi soledad
donde mis emociones no se calman,
se halla la verdad que esquivo,
pero que nunca logro olvidar.

En ocasiones me encuentra
y me ataca con lágrimas,
que como dagas se clavan
y desgarran mi alma.

Mi corazón gotea,
pero nunca se queja,
porque ira sangra
y jamás cicatriza.

Cuando no me quedan fuerzas
me miro en un espejo roto,
veo cuán mal me siento
y, en el pozo
me hundo más.

Sin razón, pierdo
todo lo que quiero,
a quien quiero,
como algo inevitable,
sin solución.

Me dejo llevar por el calor,
calor que abrasa mi corazón,
y que lo consume todo
dejando sólo frío y dolor.

Un frío que me recorre por dentro,
congelando lo que un día sentí,
congelando mis sentimientos,
impidiéndome ser
quien un día fui.

No soy capaz de recuperar la pasión
ni de esperar un nuevo día,
que devuelva la alegría
a mis pupilas
y que reanime mi corazón.

No se qué espero,
ni qué tiene que venir,
pero permaneceré plantado
en busca de mi porvenir.

Esperando la respuesta,
buscaré la razón,
que me impide sonreír
y recuperar tu amor.

 

que bellos versos en tu poesia amigo.placer leerte

 

triste poema... ánimo que todo pasa!