Ahora más

Perdido en los poemas de mi vida
camino por los charcos del destino,
por querer un poeta ser del vino
he regado con letras mi guarida.

En un mar de vinilos me cobijo,
un gato y mi conciencia me licencia
de profesor curtido en tanta ciencia,
me jubilé con sueldo pleno y fijo

después de culminar mi profesión.
Aunque de ciencias, letras he abrazado,
en un diván de versos me he sentado

y entusiasmado estoy de la afición.
Escribir con la métrica disfruto
más que mi profesión del instituto.

 

Pues es que esto no es trabajo, es placer. No sé por qué a mi me pasa lo mismo. Buen soneto que desnuda el alma del poeta. Un gusto leerlo.

 

La poesía colabora para la limpieza interior. Un abrazo, Paco.

 

Gracias poeta, un abrazo.
Paco

 

Así es, compañero.
Un abrazo