Calor.

A las dos de la tarde,

ya estamos en vivo,

y a todo calor.


El sol está que arde,

acelerando latidos,

en sobre exposición.


Calor en las calles,

reflejos mortales,

mejor llévatela suave.


Desde que el sol se muestra,

los rayos ultravioletas,

no están a nuestro favor.


Las bebidas se venden,

a grandes creces,

cruel deshidratación.


Isla de pavimento,

sin un árbol ensombreciendo,

esto no es de dios.


Desde las dos en punto,

el sudor está casi absurdo.

y se antoja andar desnudo.


Que calor en la calle,

no se escapa nadie,

y las sombrillas eso valen.


Mi desodorante,

no ha sido efectivo,

por el calor excesivo.


Ya no es como antes,

sabemos los motivos,

que será de los niños.


El calor a lo que da,

nubla la vista al andar,

no hagas movimientos bruscos.


Nadie se quiere quemar,

y todos salen a pasear,

esconderse detrás de un arbusto.


Las suelas de mi calzado,

parecen de chicle,

se van deshaciendo.


Ni a pie, ni en auto,

todo te derrite,

imposible mantenerse fresco.


Adentro estoy en un sauna,

afuera la cosa poco cambia,

y siento la ropa empapada.


Calor húmedo implacable,

y en muy poco ayuda el aire,

solo la madrugada es agradable.


El color del calor,

creo debemos un perdón,

para toda la creación.