Conjeturas

Arremetes contra mí tu cariño
que no me das tiempo de hablar siquiera,
llegas, sofocando mi delirio
de conocerte mejor, y seas mi amigo(a).

Manchas, tiras y enlodas la parte más funesta
de mi historia que es muy mía
prejuzgando mi algarabía, sin conocerme nada,
basando tus conjeturas, en lo que habla la gente mala.

Abre tu mente un poco más al destello
de la grata compañía de un extranjero,
contágiate de su risa, su llanto, su vida
y veló de la misma forma, como te gustaría que te vieran.

No empañes más el espejo,
por culpa de las malas lenguas
que al final te darás cuenta,
que no fueron más que pusilánimes inventos.

Envidias que no terminan, celos un tanto necios,
calumnias para cubrir el verso
he inventos con decoro, para arruinar un talento;
todo esto cabe, en un ser maquiavélico.

Pero tú, se tu; quita de tus ojos la venda
y date el placer de ensanchar tu conocimiento
para cubrir los errores, del hermano que te acepta.

No escupas mirando al cielo,
no te atrevas a tirar la piedra,
no mires la paja en el ojo ajeno,
no juzgues, no ofendas,
no te atrevas a hablar siquiera.

Abre tus brazos, ensancha esta cadena
que al fin como hermanos
no hay quien tropiece…
y necesite de una mano que le tienda.

 

Gracias por sus lecturas. Saludos.

 

hermosa reflexion cesar, para aprender estamos amigo.

lindos versos,

un abrazo

 

Gracias por tu comentario amiga, siempre es un placer saber de ti y recibir tus letras en mi humilde espacio. Saludos.