Cumbres espigadas

Cumbres espigadas


Son espigadas las cumbres que día a día yo escalo,
no temo a los gritos callejeros,
tampoco a los abrazos que me da el destino,
ni a ningún obstáculo invisible en mi camino a media noche;
Escucho una voz a mi espalda diciéndome que alguien esta encerrado,
desde mis entrañas con pasos veloces quiere darse a la fuga,
veo desde muy lejos una luz que se aviva en mi nariz
como un susurro desde el fondo de mi alma;
¡Lo que experimento yo!,
descubrir lo gnomos agachados en derredor,
sigo escalando las cumbres espigadas y brillantes,
nada brillante se encontrara así pues;
Últimamente el cielo me da dolor de cabeza,
estoy seguro que ha cambiado su carácter,
prefiero escalar las cumbres espigados sin mirar arriba,
las nubes giran en su andar como si trataran de confundirme.

 

Felicitaciones, muy interesante poema, saludes, te deseo lo mejor.

 

Gracias Marco Antonio, es importante tu comentario, espera mi visita pronto hermano
Un abrazo