Dejame

Deja que mi canto te lleve
hasta donde las amapolas crecen
déjame tocar tu pelo para sosegarte,
deja que mi voz te infunda
paz, para relajarte.

Deja que siga soñando
con mi débil corazón en movimiento
y al sentir tus labios
en ellos quedar presos.

Déjame respirar tu aliento cálido
y saborear tu aroma.

Deja que al hallarme perdida
en un leve silencio
me abandone en tu regazo
serena y locuaz por siempre.

[FONT=Calibri]Mi vida, uno de estos días[/FONT]
[SIZE=3][FONT=Calibri]nuestras penas serán lidiadas[/FONT][/SIZE][FONT=Calibri]
[SIZE=3][FONT=Calibri]por la ley del Amor, y[/FONT][/SIZE][FONT=Calibri]
[SIZE=3][FONT=Calibri]bajo el manto perpetuo de rojo fuego[/FONT][/SIZE][FONT=Calibri]
[SIZE=3][FONT=Calibri]seremos un solo ser, un solo cuerpo.[/FONT][/SIZE][FONT=Calibri][/font][/font][/font][/font]

 

Me gustó mucho. La sinceridad en poesía es lo mejor. Al principio creí, por el título, que se trataba de una poesía de despecho; pero no es así: es una de entrega. Mucha reputación para tus letras. Un abrazo cordial.

 

marisa. encantado de estar en tus letras... un placer recorrerlas, saludos..

 

Pues muchas gracias, por pasar a leer mis versos, Un saludo

 

Gracias por tu comentario, y por leerme. Saludos