Dime

Dime


Dime que más no puedes, de lo que puedo yo,
que eres tan esclavo como mi corazón.
Dime que no te liberaste de tu nostalgia,
que, como la mía, es igual de anárquica.

Dime que cada jornada es una odisea
ansiando obviar un recuerdo que amenaza
con destruir la endeble y fría coraza
que te salvaguarda por si me anhelas.

Dime que no puedes más de lo que yo puedo,
que este dolor también se te hizo eterno,
que navega sin naufragar en tu memoria
y que le persigue los pasos a tu sombra.

Dime que cada nueva aventura de amor
observa, impotente, renovarse al albor
la añoranza perpetua de este cariño
que se aferra, entonces, con mayor ahínco.

Dime que no puedes màs de lo que yo puedo,
que no eres ni màs valiente ni màs sereno,
que no te alcanzan las lágrimas ni otra cama
en esas noches que todavía me extrañas.

Dime que te asedia, que te esclaviza
y se burla de tus ansias abolicionistas
este ardor insaciable y desdichado
que nos asume para siempre capturados.

 

Muy bien felicidades, es muy bueno tu poema, saludos

 

Muchas gracias , un placer saber que te gustò.Saludos

 

Si Mariel que te diga que esta poesia es totalmente perpetua que captura el alma que la aprisiona que la hincha que a veces muy pocas veces la calma que se siente que se dobla que se ensancha a una melancolia a una desdicha pero que te diga exigele que te diga un placer leerte poetisa besos.