Dulce sal

Las lagrimas se secaron en mis ojos
me desapego de un dulce antojo
se esfuman tus labios y mirada
y una sonrisa esbozo
no hay pozo, no hay peso
no hay nada que cargar
ahora reposo
reflexiono en el ocio
ligero como sobre la hoja el rocío
no hay nada que temer, nada que medir
nadie a quien desafiar
no hay pretensión ni afán
y si lo hay...
sólo es volar, amor de verdad
la libertad de cada devenir original
soy espacio,
la erupción de un volcán
hasta la miseria de los barrios
soy el bueno, soy el malo
el error del cual nos prevenían los sabios
el desgarrador deseo de beber la dulzura de tus labios, fue necesario
la pretensión de corresponder a tu mirada pausada y despabilada
un amargo trago
me enseño a contemplar atento y despacio
cada instante y sus preciosos cambios
soy cada instante, ergo soy espacio
soy en la garganta el nudo
el suspiro mas profundo
mientras reconstruyo tu mirar
desenfoco como si fuera ciego por un segundo
mis lagrimas se secan
seria bonito que volvieran al mar
luego se convirtieran en vapor y precipitaran
y así, hasta la eternidad
caer como llovizna
sobre tu boca
y bebas de mis lagrimas dulce sal.

 

Ese juego del amor y la fantasía, bellas letras, saludos.