El Labriego.

En su rostro, tostado en la cañada,
lleva impresa la pena inmerecida,
que los golpes aciagos de la vida
le ofrecieron de forma despiadada.

Se le observa lejana su mirada
contemplando caminos sin salida;
y su vieja esperanza, ya vencida,
lentamente fenece resignada.

En sus manos callosas van las huellas,
que le sirven de rústicos blasones
que machetes y zarzas le dejaron.

Hoy, ya viejo, contempla las estrellas,
recordando quizás a los patrones
que su fuerza de joven explotaron.


Autor: Aníbal Rodríguez.

 

Soneto que lleva impreso el esfuerzo de la gente. La que de sol a sol trabaja para llevar el pan a sus casas. Las que sin medidas, entregan sus vidas y sueños, a otros dueños. Un gusto leer tus letras. Que me dejan pensando en estos temas querido poeta. Un abrazo.

 

Anibal,
"Hoy, ya viejo, contempla las estrellas,
recordando quizás a los patrones
que su fuerza de joven explotaron."
y continuan haciendo y deshaciendo

 

la Esclavitud y sus formas de explotación siempre han estado presentes en el afan egoísta y avaricia del hombre ..pero lejos de aceptarse como un hecho natural ,este interesante poema debe llevarnos a tener sensibilidad social y siempre ser justos y empaticos con la realidad desfavorecida nuestro del semejante.grato leer tu poema ANIBAL RODRIGUEZ.bn dia

 

Gracias por tan hermosa apreciación de mis letras apreciado poeta. Mi fraterno saludo de bienvenida a mis letras.

 

Gracias poeta Dvaldés por tu amable concepción de mis letras. Mi fraternal saludo.

 

Un poema conmovedor, los campesinos son fuente de nuestro sustento y si... han explotado su fuerza de trabajo , prácticamente esclavos.
Un saludo.

 

Nicaragua ha sido testigo de la explotación de nuestros trabajadores del campo. la mayoría, hechas por las transnacionales que usurpan nuestras riquezas naturales, y en algunos casos, por explotadores nacionales como los dueños de las grandes plantaciones de caña de las azucareras. Gracias siempre amigo mío por tu presencia en mis letras.

 

Conmovedor poema. Y acasi todos olvidan al campesino. Tan metidos en nuestro mundo digital estamos, qu equien trabaja en el tercer mundo bajo condiciones a veces infrahumanas es olvidado casi por completo. Gracias por su sensibilidad. Cuando publicamso tanta bobería hace falta alguien q