Encuentro

Como un suspiro divino
arribaste sin más equipaje
que la fragancia exquisita
de tu ternura para
envolverme en las
caprichosas redes
de tu tierno amor.

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Encuentros con el ser amado, todo el baúl has vaciado y nunca es demasiado, con fina loción y exquisitas telas tu desnudez has engalanado, pero nunca te has jactado, porque para el fantasma del amor, el ritual del hechizo se ha vuelto enfermizo, y siempre pide más y más, para encadenarnos y condicionarnos, hasta robarnos con su atracción fatal, hasta el último suspiro.

ENCUENTRO

Deslizó suavemente sus manos por su cabello
con peine dorado lo recorrió una y mil veces
descargó el peine cuando el brillo dejó verse
maquilló su rostro hasta verlo lucir muy bello.


Cubrió su cuerpo de nutritiva crema de fresa
perfumó suavemente sus puntos preferidos
se atavió con finos encajes y sedas su vestido
calzó sus zapatillas plateadas con delicadeza.

Cuidó antes de abandonar su urna de cristal
hasta el mínimo detalle, la cita sería especial
se deslizó como gacela o quizás, pavo real
caminaba sudando a este encuentro fatal.

Levantó su mirada, sonrió, todo se iluminó
siguieron a su lugar de encuentro predilecto
besos y caricias les borró espacio y tiempo
con su fantasma revivía un nuevo encuentro.
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