Enemigo

Siento vergüenza de que me consideren...
enemigo, por el simple hecho de ejercer una protesta democrática,
por el simple hecho de plantar cara a hermanos armados con escudos y porras.

Siento vergüenza de que gente perteneciente al pueblo llano,
se equiparen a dioses de piedra y mármol
solo porque su ego no les quepa en su mano.

Siento vergüenza de aquellos pobres seres
que solo saben emplear la fuerza del látigo
porque no saben gestionar...
La fuerza del diálogo.

Siento vergüenza de haber vuelto atrás en el tiempo
en un ambiente hostil y asfixiante
como si lo primario en el hombre hubiese triunfado
ante el razonamiento, la lógica y el sentimiento más espiritualizado.

Siento vergüenza... hasta de la misma vergüenza que siento,
por llamarme hermano, de los que a hierro y lenguas de fuego
destruyen lo más preciado de la creación...
La esperanza de crear un mundo juntos como hermanos...
no como enemigos.
​

 

Ayyy Sergio, no hay enemigos sino diferentes concepciones, diferentes percepciones de una misma realidad, realidad llena de problemas que hay que solucionar, y la única forma de solucionarla es con diálogo y entendimiento, con la fuerza de la razón y la palabra, llegar a un consenso y aunar esas fuerzas , sumarlas,... en lugar de dividirlas y enfrentarlas. Hay que armarse de una buena dosis de paciencia, despacito y sin pausa intentando siempre arreglar las cosas que peor no pueden estar. No hay que sentir vergüenza sino defender lo que se siente ante amigos y menos amigos, los enemigos no existen, nos los creamos nosotros mismos al no ser coherentes ni fervientes con nuestro pensamiento.
Ayyy Sergio, tu poema despierta conciencias, la de todos y lo mejor es al final de cada reflexión pensar que todos somos hermanos y vamos a intentar llegar a serlo a carta cabal. Besazos mi querido Sergio, estrellas a porrillo y repu de corazón, la máquina no ha dado señales de vida desde la tormenta jajajaja.

 

BELLISIMO, me encanta como lo dices, con los ingredientes necesarios para fortalecer esta protesta; persuasion y hasta sarcasmo pero sobre todo con mucha certeza, desgraciadamente la humanidad esta siendo cada vez mas irracional, abrazos y estrellas.

 

Muchas gracias como siempre
por leerme Isabel
Abrazos

 

La verdad mi querido amigo, somos los verdugos de nuestros propios hermanos...todo obedece a oscuros mandatos que hacen que unos ejerzan la fuerza fratricida...asi cuando las piedras lloren...no habrá quien las consuele.

Tus letras son testimonio!! hemos de luchar por un mundo de paz y de armonía así suene trillado

te dejo mi abrazo de sábado y muy colombiano

ladulcec-zza

 

Un cuadro que ofende a los sentidos.

Lamentablemente los que "marchan" en estas protestas queriendo ser escuchados y defender sus libertades, opacan la voz y aplastan las garantías de quienes tienen sus negocios en esas mismas calles.
Destrullen escaparates, perjudicando fuentes de empleo. Bloquean artérias de circulación víal imprescindibles haciendo que mujeres den a luz en sus vehículos por que no les permitieron pasar rumbo al hospital...

El derecho innegable de expresión lo llevan a otro nivel.

Mis derechos no pueden estar por encima de los tuyos y viceversa. Mi derecho a ser escuchado no puede perjudicar tu derecho a la tranquilidad en tu hogar y fuente de trabajo.

Mi derecho a caminar por la acera no me da permiso a pasar sobre los pies de nadie.

Eso, no lo han entendido.

Si queremos vivir de una sociedad o en sociedad, debemos asumir sus condiciones. Ya que mis derechos conllevan responsabilidades.

Muchos manifestantes no lo ven así. Solo entienden que necesitan ser escuchados (Y con justa razón). Pero en su desespero se llevan entre las botas a los demás.

Haciendo de una marcha "pacífica" algo verdaderamente aberrante.

Buenas líneas Sergio. Para pensar.

Gracias por compartirlas.

Un abrazo.