estaba...

estaba.

estaba parado en una esquina
desierta de esas que hay en las ciudades
medianamente grandes, en los barrios alejados.

parado en la esquina esperando
no a mi destino obviamente,
pero lo vi.
ojos rojos el mismisimo diablo.

contandome sus secretos,
charlando comodamente de la vida.
abriendome los ojos.
comentando lo que dios tarda mucho en hacer,
o tal vez nunca.

 

Buenos días,
te trasladé este poema al foro de generales que es el que le corresponde.
Recuerda colocar tus obras de acuerdo con las temáticas de cada foro.
Saludos,
Equipo de Moderación de Mundopoesía.