Fugacidad

El viento se lleva
las estelas de pólvora
quemada con la llama
de un destino incierto,
como lo es aquel momento
en que llorarán las campanas
a punta de doblarse,
anunciando el acabose de una historia.

El segundo en que te pensaba
acaba de expirar;
ahora forma parte de un pasado
que no sabe dónde terminar.
Pretendió un día ser futuro
pero cayó presa del presente:
un cobarde que no se sostiene
en sus muletas.

Las sonrisas sobreviven
por un rato,
como mariposas
en invernaderos infestados,
luego se desploman
en goteos de lágrimas amargas,
haciendo pregón del mensaje irremediable:
los tiempos felices
han sufrido una extraña mutación,
degeneradora de su especie en extinción.

-G. Arroyo, 10/Mayo/2011-

 

Y cada segundo que pasa ya no somos los mismos... Un placer dejarte mi huella y cinco estrellas

 

Amigo Gustavo, un placer visitarte hermano, hermosos versos inspirados
Saludos

 

Gracias, Elba Nery. Abrazos desde Costa Rica!!

 

Gracias, Iván, por la amabilidad de tus palabras. Abrazos desde Costa Rica!