Gallina.

Es el crítico un fracasado compositor,
un huerfano de la originiladidad,
siempre a cuestas con su virginidad,
un aterrorizado e inútil errador.

Si de cada diez mil versos,
sale aunque sea de casualidad,
uno, uno solo, bello y hermoso,
el esfuerzo me mereció la pena.

Si tanto sabes, si tanto presumes,
deja de decir pamplinas,
y pon un huevo de vez encuando,
gallina.


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Criticar es muy fácil y a veces hasta cobarde porque el autor de la crítica se esconde detrás de las cortinas. Si uno tiene fe en lo que escribe escribirá cada vez mejor y aprenderá a pasar de lo que digan los demás. Un abrazo amigo Tarugus. Paco.

 

Yo ayudo a los genios, a poner huevos.
No son gallinas.
Son humanos, pero el huevo sigue siendo una obra de arte.
Al menos, lo simboliza.