Góngora

[FONT=&quot]¿Quién eres tú? ¿Compendio de desvelos
[FONT=&quot]de hispanistas ilustres o de Dámaso?
[FONT=&quot]Si entonces, eres ángel de tinieblas,
[FONT=&quot]príncipe de la luz o, inversamente,
[FONT=&quot]uno sólo de férrea voluntad
[FONT=&quot]de ser el hacedor de un orbe nuevo
[FONT=&quot]de cristales y mirtos
[FONT=&quot]que son sólo palabras.
[FONT=&quot]El universo muere de ficción
[FONT=&quot]y los endecasílabos,
[FONT=&quot]que son sólo palabras,
[FONT=&quot]ocupan su lugar. Tenemos
[FONT=&quot]otra forma de vida: la lectura.
[FONT=&quot]En este mundo nuevo se subvierte
[FONT=&quot]la costumbre de la taxonomía:
[FONT=&quot]el reino mineral respira y siente,
[FONT=&quot]las prados son alfombras, los cristales
[FONT=&quot]se tornan fugitivos, formidables
[FONT=&quot]bostezos de los montes, los humanos
[FONT=&quot]protagonizan fábulas...
[FONT=&quot]¿Quién eres tú? ¿Qué catacresis gélida
[FONT=&quot]hay que aplicarte en esa silva virgen
[FONT=&quot]para que obre el concepto y tú seas tú?
[FONT=&quot]No cabes en tu mundo. Los poetas
[FONT=&quot]son absurdos y, más, la poesía.