Gracias Cristobal

Escuchaba por recomendación de un amigo la 9ª Sinfonía de Beethoven, ya la habré escuchado un centenar de ocasiones, y sin embargo cada vez es diferente la sensación, ya sea Toscanini, Bernstein o Von Karajan, cada uno la dirigía muy a su manera. Es apabullante sentir esas notas e identificar los trazos peculiares de cada director.

Levantan la conciencia de uno mismo hasta niveles supraterrenales en los que me doy cuenta de lo pequeños que somos.

Gracias, Cristóbal, por recordarme una de las manifestaciones más bellas del genio humano.

Hoy me hacia falta un toque de paz. ¡Y vaya que me ha llegado!

 

La musica clasica siempre es un remedio
para descanzar y relajarse, para alibiar las penas
y alegrar el corazon, y en medio de una sinfonia ya sea de
Tchaikovsky o Mozart que mejor que escribir un poema.

 

Tienes toda la razón
Un beso
Rosario

 

Rara vez. Pero gracias Rorasio.

Saludos

 

Gracias, Manuel, por leerlo y comentarlo.

Nada sociega el espíritu ni alivia la migraña como la musica.

Saludos.

 

Hola, volveré a escucharla, antes de dormir.... Grato leerte Saludos y estrellas
¡SONRIE

 

CÉSAR
Las horas de dedicación del compositor alemán Ludwig van Beethoven para componer la 9ª. Sinfonía, dieron como resultado para que sea declarada como patrimonio de la humanidad por la Unesco. Nada mejor para con el toque de paz, escribir poemas con su impulso musical.

Un fuerte abrazo. ​

 

Siempre es motivadora y por otro lado tranquilizante.

Un abrazo.