Habito

Me consume el instante donde habito,
el destello que me llama a mirar
la envoltura que me permite percibir
el alma que me arroba en sentimientos

Habito
siento que habito...
y mi vivencia no alcanza a apagarse por mi futura ausencia
ni vuelve a ver sus historia
tras los pasos andados
para explicarme cómo es que habito.
Sencillamente habito,
amo
paladeo mis minutos de néctar
y atesoro mis heridas abiertas
tras el fragante umbrío
de mi doliente habito
donde no todo puede
servirme de rocío

Como cuerpo encantado
tras la rendija abierta
que me conduce al mundo
que comparto y batallo
para sentirlo mío.
Habito
sencillamente habito.

 

La maravilla de estar vivo. Grandes versos poeta Melquíades, de tu reconocida calidad.

Saludos.

 

Gracias cipres, un abrazo afectuoso