Inseguridad

Con la cabeza gacha y el mentón sobre el pecho,
Las manos apretadas y el corazón maltrecho,
Me desangro sin tregua por caminos de vida
Y anhelo que paciente me cures las heridas.

Con el alma agobiada, descorridos los velos,
Me arrodillo impotente sobre este duro suelo
Y ruego con vehemencia que tus manos benditas
Se posen en mi frente con ternura infinita.

Te exijo que me mires a los ojos… Tú, Padre !...
Un momento tan solo, tan solo un breve instante
Para que con premura, Tú que todo consientes,
Lo tornes a mi lado, candoroso y ardiente.

Con el postrer aliento que escapa a mi agonía,
Te exigiré la gracia, Hacedor de mis días,
Que presto me lo acerques, sin dudas ni recelos,
Para que calme urgente mis ansias y desvelos.

Y si acaso no escuchas mi plegaria vehemente,
Si sordo en tus quehaceres me ignoras o me mientes,
Me he de cobrar con creces el desaire y hastiada
Me voltearé a morir, rebelde y postergada.​

 

Auch, cuánto dolor en los versos, cuánta desolación, por eso la petición fuerte, precisa.
Un gusto leerte, poeta. Besos,:::hug:::

 

Este poema es excelente.
Me ha gustado mucho leerte.
Un placer
Recibe un afectuoso abrazo
Joan

 

Que Dios Cal Me El Dolor De Tus Poema. Nunca Estas Sola Ni Insegura Una Vez Que Lo Comenta

 

Ah!.. Tus palabras me alientan.- Por eso las espero.- Amiga, me das fuerzas para proseguir.- Gracias por estar.-

 

Placer es el mío, al recibir tus palabras.- Gracias por comprender, por compartir, por alentarme.- Mi cariño por siempre.-

 

Si estás, ya no estoy sola, si comprendes, me alientas.- Gracias amiga, déjame estar a tu lado.- No te olvidaré.-
Todo mi cariño.-

 

Preciosa la rima!!!!!! Que gusto leerte!!!! Un fuerte abrazo.