Isabel.

Era rubia, era la menor
cuidaba los excesos de alcohol
de su hermana mayor

Coqueteaba sin darse cuenta
me beso si querer
era todo lo que los cuentos cuentan
un sombrero, una cinta y mi calma hecho a perder

La encontrare por ahí,
en un poema, en un verso,
cuando me asalte el recuerdo
de sus besos extrañare sus labios
Y el tatuaje que nunca vi

La quise con locura desenfrenada
mientras me lo permitió
no tendré la fama del poeta al que vio
pero en mi corazón se instaló

Le escribí un poema rogando por un último beso
pero no alcanzaron los versos
o no eran buenos
ojalá volvamos a coincidir
ahora tengo mucho por escribir,
Te llevaré en mi mente, en el corazón y en la piel
gracias Isabel.