La alcantrilla

LA ALCANTARILLA​

“Funesta alcantarilla que te ahogas con las hojas,​

Tú alimento…, miles de rosas de papel que te abordan, pálidas buscando refugio en las sombrías calles….ya respiras vidas nuevas mojadas al llegar la llovizna.​

Y al sentir la madrugada con su miel de alegría, se detiene el tiempo como el sol tostado tomando un remedio sucio merecido; porque en tus venas se guarda el corazón de los recuerdo de todo ser que extraña cosas que perdió a lo lejos.​

Aquí donde las entrañas del mundo reposa, están tus ojos casi abiertos, viendo y esperando lo vencido de cosas que trae el agua en sus ríos muertos y que tú sola palidez puede recibir con alegría, a la clara luz del ruedo de tú frente avivas las cadenas oxidadas del olvido porque tus pasos no dejan huellas, son pasos muertos, y en la oscuridad es un camino a la quietud de la muerte…”​

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