Maldito destino

MALDITO DESTINO

Una tonada de Mozart
trajo a la memoria
la mujer acariciada de recuerdos pasados,
pasados recuerdos que entre más tiempo pasan más presentes son,
recuerdos que repican y más repican
tal el son de una sentida canción.

OH memorias
de una niña ,
impúber niña en la ciudad mas grande de la aldea,
dulzura abrigada del bullicio de las calles atestadas de sonidos,
mirando la cara triste de los mendigos,
el caminar sin horizonte de los locos,
asechada de ser raptada y violada ,
en fin
niña pura,
arropada con
todas las adversidades
de las ciudades desdibujadas, desalineadas.

Niña inocente tal perfume de flor
que junto a su madre y su otra hija cual pétalos de flor,
un día cualquiera el cruel hombre las abandonó.

Aun así la niña abandonada
junto a su madre y su otra hermana
la adversidad ganó,
y ella a la escuela con alegría caminó
y escuchó y leyó el Quijote, La vorágine ,La Odisea y la romántica María,
hasta que un día oscuro de truenos y centellas
el maldito destino
la madre de esas niñas
el dulce sueño, la irreparable muerte
al cielo llevó.

¿Tanto dolor en al alma de esas flores
al quedar tan solo el jardín del hogar?

Aun así, sin padre, ni madre,
resplandeció la luz de los abuelos paternales
y calmó a ellas
la mirada temerosa del dolor.

La flor abrazaba el cielo,
sus pétalos y corolas eran más brillantes en cada primavera,
y día a día bailaba la música de la vida,
hasta que otro día
el maldito destino
la fragancia hermana
la muerte por siempre se llevó.

Y hoy está acá,
allá, no se,
con sus dos retoños…
Escuchando a través de los cristales
de bellos colores
la claridad amorosa de la vida,
iluminada por el sol de la paz y la tranquilidad.

Y todo va quedando en los recuerdos,
¡Maldito destino!



luecamon