Máscara bullanguera

Máscara bullanguera anaranjada,
máscara de mirada dura como la vida misma, sin corazón.
Ojos de relucientes espejos;
espada y lanza en la mirada.

Aquél que lleva la cruz de una máscara eterna
quedará sepultado bajo el peso de la conciencia despierta.

Máscara de jolgorio y alegría
lleva entre sus vestidos el luto guardado;
su mirada perdida le delata.
Hay escombros de penas detrás de sus lentejuelas;
retazos de soledad muerta que hablan.

Sus labios aún preservan
el rojo encendido del amor,
y laten sus láminas a mil por hora,
¡Ansían otro tiempo para volver a amar!

La felicidad es flor furtiva entre sus dedos,
sale de noche y pasea entre oquedades,
quiere abrir la abertura de la esperanza con superficialidades.



Autora: Edith Elvira Colqui Rojas-Perú-Derechos Reservados

 

Superficialidades tan hermosas como tirarte un pedo, en la cara de tu padre.
Sí...

 

No me hace gracia Nommo, tu comentario no es nada técnico ni respetuoso. ¿No hay normas para los poetas irrespetuosos por aquí?

 

Gracias por tu me gusta, querido Maramin

 

Pero Edith, ¿ Prefieres que ande enmascarado ?
Como tu ídolo...
Que no se da a conocer, dado que en vez de cara, tiene una cruz.
Y es una moneda.
¿ Verdad ? Sólo el dinero te da la Felicidad.
Pobre ricachona.
Siempre, en tu mundo de mentiras, intentando aparentar que eres como los demás.
Pero no es así.
Tú tienes tus propias raíces, y no las puedes negar.
No debes hacerlo. ¿ Respeto ? ¿ A quién ? ¿ A una máscara como la que tú te pones ?
Para aparentar que...
Tienes conocimientos exhaustivos, al respecto de...
Bla, bla, bla. Mucha filosofía, ¿ No es cierto ? Muchos libros de texto, para la escuela.
Pero tú sabes a lo que me refiero. ¿ Normas ? ¿ Respeto ? Apariencias...
Claro, para que no te consideren forastera.
Llevas puesta una máscara.
Y dices: " No me hace gracia tu comentario. "


Como Julio César, en Roma.
Porque esas palabras son tan bonitas...
Tan nobles, y tan linajudas, y tan alegres, y tan macizas, y tan, tan, tan.



Tarantantán.