Mosqueteros.

Personalidad...
Individuo y raza.
Genoma humano.
El toro, en la plaza.


Pianista y piano.


Yo y ustedes.
Porque nosotros somos dueños de nuestro destino.
Ordenador personal, y red de redes.
Internet y el Correcaminos.


Grupo musical y guitarra eléctrica.


Dedo meñique y mano.
Casa encantada y mirada tétrica.
Whiskey escocés y puro habano.
Llaves de casa y alfombra para secarse los pies, bajo la puerta.


Paraguas y lluvia. Michael Jordan y Chicago Bulls. ¡ Tres puntos, colega !


Chicles, Kiosko.
Revista del corazón, artículo en su interior.
Letra del alfabeto y novela de ciencia-ficción.
Monasterio y padre prior.


Personalidad... Todos, para uno, y uno, para todos.

 

Curioso poema, la verdad que me ha gustado.

 

Casi siempre me hacen sonreír de agrado tus poemas...Pongo el casi, porque casi nada es absoluto...
Me has hecho retroceder a unos años de cuyos momentos si quiero acordarme, Quijote, mas Sancho, Rocinante y la bandera de molinos ¡que quimera! jajaja.
Ese era el lema que tenia con mis tres amigos de la niñez y parte de mi adolescencia...Uno para todos y todos para uno...Hasta mi abuela me decía a la hora de comer, ¡Termina pronto Dartagñan, que ahí fuera te esperan los mosqueteros! jajaja
Un abrazo Nom...

 

La personalidad va definiendo la actuación de respeto en los espacios, logrando la integración
y el trabajo en equipo. Un saludo cordial desde Venezuela.

 

¡ Gracias, compañeros ! Lirae, supuse que eras mujer.
En fin, ¡ Sorpresas te da la vida !
Yo quiero dejar de fumar.
Y para ello, debo tomar consciencia del Amor que Dios siente por todos sus hijos.
Incluyéndome en ese grupo. Los elegidos somos todos.


No hay favoritos. Pero tampoco hay malditos, ni cabritos, ni estúpidos, ni holgazanes.


Para Dios, todos son los elegidos.
Y si yo me separo de ese grupo, y me dedico a pensar en cosas feas y malas...
¡ Me entran ganas de fumar tabaco !
Recórcholis.


Por eso, he ideado este poema terapéutico. Para todos los fumadores de tabaco.