Musicando.

Surge la razón de mi existir ufano
a partir del ámbar de tus ojos fijos.
Me bañan de tibieza
los mayores deseos cotidianos,
arrojándome a jalones
a tu brazo como niño sumiso..

¿Y de ti?
Amante diario y genuino
como las betas tras cristales,
se brota la roja sangre
en nombre de las ternuras fijas.
Rincón de sombra leve y sugerente,
como tu candor de verano.

Así me meces entre la premura
esa, que se esconde entre
tu vientre y tus candorosas manos.
¡Feliz cuál vista de frescos!
¡Ameno cuál profundidad de mar!
Así, me tienes en tus palmas,
bajo de tu sombra....

En grato camino de ruta larga.
Lúcido aderezos fijos y leves que
entre mis deseos y tus quereres,
se va tejiendo mi existir...
Mensajero de mis noches ¡Nardo!
me enrareces con tu locura
¿Y de ti? Voy como lira, musicando...©

 

Hermoso y sentido poema. Fue un placer leerlo poeta.

Un saludo.

 

Muchas gracias mi querida poetisa por este poema maravilloso y cargado de tu acostumbrada sensibilidad para el arte de la poesia. Es increíble la capacidad que tienes para llegar al alma del lector con tus cuidados y hermosos versos. Gracias por este regalo. Te dejo un abrazo y estrellas además de reputación por tu genialidad.