nefertari

nefertari

podemos observar las piernas de nefertari
brillando bajo una luna de rascacielos
besar el xolotlán dormido desde una mesita de madera
pintada con mediocridad.
añorar el caribe desde la arena cubierta por la selva
imaginándonos en una canoa para escaparnos de la tarde.
podemos consentir a los buses made in russia hacer y deshacer
como los grandes premios nobel
someten a una etnia a la mayor de las miserias.
incluso podríamos decir
lo único que nunca nos atrevimos a decir en el barrio
o simplemente escuchar el grito de los acribillados.
podemos llorar por los que ya no pueden llorar,
y cabrearnos con los que ya no tienen los huevos
para regalarnos una lágrima sola.
o simplemente vos me podés mostrar
la abertura de tu vestido en el momento justo
en que faraones y godos caigan derrotados por mi mano.

 

Muy robusto, este poema. Musculoso. Potente.
Creo que tienes coraje, muchacho.
Sigue así.

 

Antes nos esmerábamos por descubrir y explorar nuestras emociones, hoy en día podemos consumir las de otros que están disponibles en youtube; y completamente GRATIS. Saludos cordiales para ti orees.

 

Ese final me encantó, totalmente inesperado.

Me gusta el toque romántico que le das a los poemas sociopoliticos jaja, o al revés, el toque socio que das a los poemas de amor.

Un besito.

 

Los indígenas centroamericanos siempre damos buena cuenta de nuestras enemigos. Claro, si decidimos sacarlos del olvido para ridiculizarlos.

 

Por supuesto. Para eso podemos bailar al ritmo de bowie antes de sintonizar a Marimar. Yo, que desayuno todos los días con cnn HD, doy fe de las maravillas de sus telenovelas mexicanas.

 

Son viejas mañas que se le pegan a uno de tantas y tan legendarias discusiones en el foro de socios.

Además, como bien señalaba un conocido gaditano hace muchos años, escribir poesía es permanecer vigilante del entorno. Lo que sucede a nuestro alrededor debería ser el ritmo de la música con que bailemos.

Un besito, Elenita.